La NASA anunció el descubrimiento de un planeta cuatro veces más grande que la Tierra, con características que tienen intrigada a la comunidad científica.
¿La razón? Esta Supertierra emite una señal periódica que podría indicar la presencia de vida en su interior.
Este mundo, bautizado como TOI-1846 b, fue detectado por el telescopio espacial TESS, lanzado por la NASA en 2018. La señal que emite se repite cada año con una intensidad particular.
Otro dato sorprendente es que dicha Supertierra tendría un océano profundo, lo que abre nuevas posibilidades en la búsqueda de planetas habitables fuera del sistema solar.

TOI-1846 b, una Supertierra que emitiría señales de vida, según la NASA
TOI-1846 b es un exoplaneta, es decir, un cuerpo celeste que orbita una estrella fuera de nuestro sistema solar, y cuyo tamaño es casi cuatro veces el de la Tierra.
Se ubica a aproximadamente 154 años luz de distancia, en la constelación de Lyra y orbita una estrella enana roja cada cuatro días.
La NASA lo ha bautizado coloquialmente como una “Supertierra”, por su tamaño, composición y similitud parcial con nuestro planeta.
Lo que más ha llamado la atención de la NASA es la señal luminosa repetitiva que emite y que fue detectada por el telescopio TESS, que fue lanzado en 2018 precisamente con el fin de rastrear este tipo de fenómenos cósmicos.
La señal, según detalló la NASA, corresponde a un patrón de disminución en la luminosidad de la estrella madre, lo cual ocurre cuando el planeta pasa frente a ella desde nuestro punto de vista.
Los expertos han notado que este comportamiento no solo es cíclico, sino que muestra una intensidad particular cada año en el mismo periodo.
Esta señal entra en la denominada “brecha de radio”, que agrupa a planetas que se encuentran entre los mundos rocosos como la Tierra y los gigantes gaseosos similares a Neptuno. Esta clasificación sugiere características únicas tanto en su atmósfera como en su estructura interna.

La Supertierra TOI-1846 b podría tener un océano profundo: NASA
El equipo de la NASA, liderado por Abderahmane Soubkiou, estima que el exoplaneta tendría una temperatura de 295 grados Celsius sin atmósfera.
Otros grupos plantean que TOI-1846 b podría contener agua líquida o hielo, lo que implicaría una estructura geológica compleja.
Los modelos actuales sugieren un núcleo sólido y rocoso, por lo que la Supertierra estaría cubierta por una gruesa capa de hielo o un océano profundo.
Además, tendría una atmósfera delgada que permitiría condiciones estables que abren la posibilidad de procesos relacionados con la vida.
Desde su operación, el telescopio TESS ha registrado más de 7,600 tránsitos. Ha confirmado la existencia de más de 630 exoplanetas.
El hallazgo de esta Supertierra representa un avance significativo en la búsqueda de planetas habitables.
