Pasar tiempo en la cárcel es considerado como una de las peores experiencias que cualquier persona puede vivir…aunque ese no es el caso de un joven que hace unos días irrumpió por la fuerza en una prisión de Alemania, por amor, según su testimonio…aunque tal vez un especialista de la conducta humana tenga otro diagnóstico.
Los hechos sucedieron la semana pasada, en el centro penitenciario juvenil de Vechta, ubicado en el noroeste del país.
Según fuentes consultadas por la agencia DPA, el joven de 18 años escaló un muro de cuatro metros en un intento por llegar hasta la ventana de la celda donde estaba su exnovia, en el primer piso.
Un portavoz de la cárcel dijo que el “bateado” estaba desesperado por lograr que la joven cambiara de opinión, por eso aprovechó la cercanía de una luminaria cercana, para escalar la pared. Ahora las autoridades han forrado con alambre de púas el farol.
Pese a los esfuerzos del “Romeo alemán”, los oficiales de la prisión lo interceptaron antes de que cumpliera su cometido y le exigieron que bajara.
El chico debe estar profundamente enamorado, pues ignoró las insistentes peticiones de los oficiales, obligando a que los bomberos entraran en acción, apoyados de una escalera.
Según la televisora regional NDR, el hombre dio todo un espectáculo en las alturas, pues en su intento por no quedar atorado en el alambrado de púas, se quitó varias prendas de vestir, quedando medio desnudo.
Sobre su historia de amor, se sabe que su expareja, también de 18 años, había terminado con él por teléfono, pero quizá la hazaña del joven la haya hecho cambiar de parecer…o pedir una orden de restricción.
Ahora, el sujeto es investigado por invasión de propiedad privada y contacto no autorizado con prisioneros.
No está claro por qué no reservó una visita a la prisión en lugar de emprender su aventura de escalada.
Con información de AP y BBC.