Durante su visita al Santuario de Loreto, en Italia, Francisco toreó a los feligreses que se dieron cita en la basílica para conocerlo e intentaron besarle las manos.

El pontífice rechazó el gesto de una larga fila que intentó acercarse a su anillo, quitando bruscamente su mano mientras ellos hacían un esfuerzo por tomarlo con humor, como explica ABC. 

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El anillo del pescador

De acuerdo con InfoVaticana, el anillo del pescador es una joya que sólo puede ser portada por el Papa, ya que se trata de un símbolo del sucesor del apóstol San Pedro y por ello es destruido cuando su dueño fallece. 

Sin embargo, algunos testigos aseguraron que minutos antes se había dejado besar por decenas de religiosos y cleros, aunque otros afirman que se trata de una acción llena de humildad, pues a Bergoglio no le gusta que los creyentes se arrodillen ante él como un gesto de sumisión.