La encargada de una tienda de santos puso a bailar a San Chárbel al ritmo de "Carmen, se me perdió la cadenita". Un momento que trascendió en redes sociales.

La escultura del asceta y religioso maronita libanés se movía con facilidad ante los pasos de la mujer, quien disfrutó de la cumbia como si estuviera acompañada de un humano. 

"Con 'agarradita' de nalga y todo. Efectivamente San Chárbel es un loquillo y esa mujer es la fiesta, hace bailar hasta a los santos", comentaron usuarios de redes sociales.