Siempre he dicho que de todas las chocantes mal llamadas corcholatas, Marcelo Ebrard me parece es el que tiene más carisma. Pero además, ha sabido manejar de manera más fresca y natural sus redes sociales. Hay algunos a quienes se les da el carisma y a otros no, seamos francos y sinceros.

No estoy diciendo que pudiera llegar a ser mejor o peor que sus otros contrincantes, pero de que conecta mucho mejor en redes sociales con la gente sin duda sí que lo hace.

Yo lo sigo en TikTok. La verdad es una red social que en lo personal me entretiene mucho.

Mi hija adolescente se enoja conmigo porque tengo mi cuenta ahí y a veces subo tiktoks (espero se diga así) cantando y haciendo videos con mis perros… digamos que se avergüenza de mí por considerar que es una red exclusiva para jóvenes.

Y Marcelo Ebrard lo sabe y ha sabido capitalizar el carisma que tiene para tener su propia cuenta en TikTok. Que yo sepa es el único de las  corcholatas que usa esa red.

Marcelo Ebrard quiere conectar con los más chavos, con los jóvenes, siendo cercano a ellos a través de estas redes.

Y estando yo en esas, revisando cuentas, me topé con la de Ebrard, donde  hay un TikTok que se aventó que pensé: “Este hombre ya se siente el rey de reyes y siempre se ha sentido así y se lo quiere recordar a la gente”. Es lo que vi en una entrevista que le hace Jorge El Burro Van Rankin, un joven que no es tan joven ( tiene más de cincuenta años) pero sigue conectando con los más chavos —porque además se ha puesto de moda que toda esta generación de conductores de los ochentas y noventas ahora tengan sus espacios propios convirtiéndose en entrevistadores y casi terapeutas, entrevistando a altas personalidades y realmente logrando entablar unas entrevistas francas, abiertas, relajadas. Lo que a los jóvenes sin duda les atrae y gusta.

Bueno, pues en esta ocasión, en ese TikTok subido a la cuenta de Ebrard, este es entrevistado por El Burro. La verdad es que Marcelo pone al presidente AMLO como que antes era su súbito y él, el canciller, su jefe. No le avienta porras como tal a Obrador, sino que lo posiciona como un hombre intransigente y berrinchudo y él se coloca como el mediador y jefe del momento, cuando el presidente acampaba en señal de protesta en el Zócalo…, en sus primeras marchas de protesta, porque ha tenido muchas.

La verdad, muy alzado don Marcelo en ese TikTok y entonces cuando lo vi, me quedó clara una cosa: Ya hay una brecha muy grande entre Ebrard y Obrador y hay un juego bastante turbio.

Pienso que Ebrard se mantuvo fiel al presidente, así como le gusta a él, en tanto no empezara la contienda por la presidencia para el 2024.

Ahí estaba aquel Ebrard hace unos meses con su “misión cumplida, señor presidente”.

Pero en cuánto Obrador sin querer queriendo destapó a sus corcholatas y a todos nos quedó clarísimo quién es su consentida, pues ahí la cosa cambi y entonces Ebrard está haciendo lo propio: está viendo por él y por ganar pasando por encima de quien sea para llegar a la presidencia en 2024.

Ebrard me parece inteligente y ya se dio cuenta que porras no recibirá del residente; el llamado “piso parejo” nomás no lo hay, entonces ahora lo que quiere dar a entender con esta clase de tiktoks y de contenido en sus redes es que él se manda solo, que Marcelo fue jefe y lo seguirá siendo y que el presidente es esa persona a la qué hay que darle el avión y meter al corral porque se sale del guacal…

Por eso en este  TikTok da a entender que al presidente se le debía tratar casi como un loquito enojado, para lograr que las cosas estuvieran calmadas.

Esa es la estrategia de Ebrard. Dar a entender que él tampoco comulga con el presidente AMLO y que coincide con la oposición al prácticamente ya ignorarlo y considerarlo una persona difícil.

Este TikTok que ha simple vista puede ser un TikTok más, es mucho más profundo de lo que se ve y tiene un significado mucho más poderoso si se le pone atención .

Ahora el presidente tiene serios problemas porque de muchas maneras necesitará, de aquí al 2024, a Ebrard para todos los temas de carácter internacional, sobre todo con Estados Unidos y para Ebrard también le será difícil despegarse de la imagen de Obrador.

Yo diría que lo más sano es que Marcelo Ebrard se bajara de la Secretaría de Relaciones Exteriores y de la 4T e intentará hacer camino propio.

Porque se ve muy mal que estando dentro, ignore al presidente o dé a entender que sí, que también cree como todos los opositores de Obrador que le faltan unos cuantos tornillos .

Son momentos de decisiones.

Y yo creo que a muchos ya no les conviene estar junto al presidente nada más por tener un hueso asegurado. Estar junto al presidente les perjudica.

Y también le perjudica al presidente mantener cerca de él a gente que se está separando de él poquito a poquito dentro de Palacio Nacional.

En tanto ellos se traicionan sin pudor, pongamos nuestra atención en quién  pueda ser el que más bien le haga a este país .

Aquí les dejo el video para su análisis.