Guillermo Alejandro Sesma Suárez envió la siguiente nota aclaratoria:
“A la opinión pública y al medio SDPnoticias: Con relación a la publicación del 24 de agosto de 2025, titulada ‘¿Sabe Ebrard que la cúpula empresarial es cómplice de violencia vicaria?’ (https://www.sdpnoticias.com/opinion/sabe-ebrard-que-la-cupula-empresarial-es-complice-de-violencia-vicaria/), rechazo categóricamente las acusaciones falsas en mi contra, que me relacionan con violencia sexual, física, psicológica y corrupción de menores. Estas afirmaciones carecen de pruebas y constituyen difamación".
“Al igual que Bernardo Voguel, fui víctima de denuncias falsas orquestadas por Ana Katiria Suárez Castro, contratada por Maha Christiane Schekaiban Tohme y Regina Seemann Audiffred, quienes fabricaron la carpeta de investigación CI-FIEAE/C/UI-1 C/D/00358/10-2024 en la Fiscalía de Investigación Estratégica de Asuntos Especiales. Esta carpeta, iniciada el 30 de octubre de 2024, investiga actos de corrupción, como pagos para manipular dictámenes psicológicos y acelerar denuncias, involucrando a Ana Katiria Suárez, Ricardo Leonardo Mosqueda y quienes resulten responsables".
“No tengo ninguna relación con estos actos ni con el Colectivo Nacional No Más Presos Inocentes. Pido a SDPnoticias una rectificación pública inmediata, aclarando que las acusaciones son infundadas, y que publique esta nota con la misma difusión que el artículo original, conforme a la ley mexicana. Me reservo el derecho de emprender acciones legales por difamación”.
Señor Sesma: No acostumbro responder las réplicas que recibo. Hoy lo haré porque el tema me parece particularmente delicado. Desde luego, tiene usted derecho a emprender acciones legales en mi contra, ya que soy el responsable de la publicación de la carta de Maha Schekaiban.
Si tuviera que responder una demanda suya pediría a mis abogados que solo dijeran: “Le creo a Maha y no a Sesma porque la vi llorar”.
La única vez que platiqué con ella el llanto la interrumpía si hablaba de sus hijos, que su exesposo multimillonario le arrebató. Dice la zarzuela: “Los ojos que lloran no saben mentir”.
Saludos cordiales.