El sistema bancario de México llega a 2025 con capital sólido y liquidez holgada, pero con fuerte concentración y un mapa competitivo que se reacomoda por ventas, nuevas licencias y presión tecnológica.
Esta columna repasa indicadores (IMOR/ROE y crecimiento de hipotecario, automotriz y empresas), la concentración BBVA–Banorte–Santander, el reto de Banamex con el 25% de Chico Pardo, la media tabla (HSBC/Scotiabank), los casos Kapital/Intercam, CiBanco y Vector, el segmento popular (Coppel, Azteca, Compartamos), los regionales (Bajío, Banregio, Afirme) y, ahora, los disruptores de los próximos 10 años. Cierra con una mirada a captación y el tamaño del sistema frente al PIB y la brecha PYME.
Indicadores CNBV/Banxico: morosidad, rentabilidad y crecimiento
• IMOR del sistema banca múltiple estable alrededor de 2%; vivienda continúa como el portafolio más sano, consumo más elástico al ciclo.
• ROE sistémico en doble dígito bajo, con dispersión por mezcla de negocios y costo de riesgo.
• Cartera en expansión real: hipotecaria sostenida; automotriz reconfigurada por financieras de armadoras; empresas (middle market y grandes) repunta con cadenas productivas y nearshoring.
Concentración: los “tres grandes” dominan
BBVA, Banorte y Santander concentran cerca de la mitad de los activos y cuotas relevantes en empresas y consumo. Su escala en canales y tecnología crea barreras de entrada y presiona márgenes de competidores.
Banamex: 25% “mexicanizado”… y dos décadas de rezago que cerrar
La participación del 25% de Fernando Chico Pardo (a múltiplo atractivo de valor en libros), estabiliza la gobernanza, pero el reto es de ejecución: recuperar segmentos bajo/medio, modernizar originación y sistemas, y reposicionar la marca en regiones. La OPI exigirá historias de crecimiento y eficiencia, no solo narrativa.
Media tabla: HSBC y Scotiabank
Sólidos pero sin romper la inercia. Prioridades: acelerar originación digital en hipoteca/auto, profundizar PYME con datos transaccionales y defender márgenes en empresas frente a los tres grandes y regionales ágiles.
Procesos opacos: Kapital/Intercam, CiBanco y Vector
Reconfiguración de portafolios y licencias con información pública fragmentaria. La transparencia de procesos será clave para preservar confianza de clientes y contrapartes y evitar “ventas en pedazos” que degraden valor.
Popular: Coppel, Azteca, Compartamos — alta morosidad, alta rentabilidad
Modelos de alto rendimiento sostienen ROE con tasas elevadas pese a IMOR superior al sistema. El reto es equilibrio entre inclusión, costo del crédito y estándares de servicio y cobranza.
Regionales: Bajío, Banregio, Afirme — crecimiento orgánico y prudente
Cercanos a clústeres productivos, decisiones rápidas y disciplina de riesgo. Para sostener ventaja requieren profundizar analítica, alianzas sectoriales y ofertas integradas (pagos, crédito, nómina, comercio exterior).
Lo que viene: los disruptores de la próxima década
• Walmart: Ecosistema de pagos, remesas, créditos al consumo y marketplace; ventaja en tráfico físico y datos de comportamiento.
• Mercado Pago: Adquirencia, créditos a vendedores/consumidores y cuenta digital; escala regional y data de e‑commerce.
• Nu: Banca digital con licencia en México; experiencia sin fricción y costos bajos presionan pricing de banca tradicional.
• Klar y Plata: Originación ágil, underwriting con datos alternativos y foco en unit economics; compiten en nichos donde la banca tarda.
Estos jugadores no siempre buscan ser ‘bancos universales’; buscan dominar journeys específicos (pagos, BNPL, tarjetas, microcrédito) y apropiarse del cliente con UX superior y costos operativos más bajos.
Captación: dónde está el dinero (vista y valores)
La captación a la vista permanece concentrada en los grandes por efecto de nómina, adquirencia y banca digital masiva. Los valores (CETES, fondos, pagarés) son usados por clientes de mayor ticket y empresas como alternativa táctica de liquidez. El reto para los medianos es capturar nómina y pagos para anclar depósitos estables y abaratar costo de fondeo.
Tamaño del sistema vs. PIB y la brecha PYME
El crédito bancario al sector privado como porcentaje del PIB en México sigue por debajo de economías pares, reflejo de informalidad, historial de choques y una banca conservadora. La retórica pro‑PYME contrasta con la realidad: la penetración efectiva sigue baja, con originación costosa y garantías exigentes. La solución pasa por: (i) scoring con datos fiscales y de pagos, (ii) garantías parciales bien diseñadas, y (iii) rails de cobranza y pagos interoperables que reduzcan costos y pérdidas esperadas.
Más competencia, mejor supervisión
La concentración exige competencia efectiva —incluida banca digital con licencia— y supervisión que premie transparencia y castigue opacidad. Campo parejo en capital, liquidez y gobierno corporativo es condición para que la innovación escale sin arbitraje regulatorio.
Diez años hacia adelante: IA y nuevo orden financiero
La IA transformará originación, prevención de fraude y cobranza; la tokenización y pagos instantáneos cambiarán liquidez y tesorería; y la competencia vendrá tanto de bancos como de plataformas. México puede capitalizar el nearshoring si alinea regulación pro‑competencia con inversión en tecnología y talento.
Fuentes (públicas)
CNBV — Portafolio de Información; definiciones IMOR/ROE. Banxico — Reporte de Estabilidad Financiera 1S-2025. Reuters/FT/AP — venta del 25% de Banamex. Deloitte y HR Ratings — participación por activos y concentración. SHCP — comunicado sobre CiBanco e Intercam. Moody’s Local — informes sobre Banco Azteca y Compartamos.
Mario Sandoval. CEO FISAN SOFOM ENR. Banquero y abogado con más de 30 años de experiencia profesional a nivel directivo.