Cómo cada año este pasado ocho de marzo se realizaron las marchas conmemorativas al “Día Internacional de la Mujer”, evento realizado en la mayoría de los estados que conforman el país, pero la interrogante es, ¿qué nos dejó está marcha?

Lamentablemente en algunos lugares al término de esta actividad se registraron algunas anomalías, debido a que hubo quemas, pintas, insultos y agresiones hacía las mujeres policías quienes solo cumplían con su trabajo.

Entonces nos deja como enseñanza qué, lamentablemente entre las mismas mujeres muchas veces no se apoyan y eso es parte del error, sí entre ellas no hay apoyo, no hay respeto, ¿Entonces que podemos esperar del sexo opuesto?

Para que haya un cambio verdadero, se debe comenzar por apoyarse entre mujeres, el respeto es esencial, sí sabes que tú compañera de lucha solo cumple con su deber, ¿para qué agredir su integridad física? o sí ves que tú compañera solo está alzando la voz en representación de miles de mujeres, ¿para qué detenerla o intimidarla?, Claro, siempre que esta no tenga una conducta fuera del objetivo.

El día ocho de marzo en mis redes sociales posteaba lo siguiente: “El ocho de marzo es un día para reflexionar lo que hemos avanzado y lo que hace falta por hacer, el reto que tenemos como sociedad para ofrecer a las mujeres una vida libre de violencia e igualdad es muy grande, pero debemos seguir en este caminar juntos mujeres y hombres. Porque las quiero fuertes, libres, empoderadas, pero sobre todo, las quiero ver feliz.”

Es cierto que el machismo ha llevado a qué las agresiones sean más comunes hacia la mujeres, pero hay casos en qué es lo contrario. Por lo tanto la lucha debe ser por los dos géneros.

Hay hombres que entienden la problemática del asunto y que también se suman a esta lucha, como su servidor.

Siendo así, es que realmente defiendo este movimiento de las mujeres, pero así también repruebo los actos vandálicos que algunas de ellas hacen, no se vale quemar, humillar, insultar, agredir o pintar, no porque importe más una escultura o una pintura, sino porque con ello no ganamos nada.

Quiero aclarar que apoyaré el movimiento, siempre y cuando se conduzcan sin agresiones, hay que considerar en las próximas actividades o marchas que sea de manera pacífica, con respeto hacia terceros.

¡Claro! Somos una sociedad llena de corajes porque nuestras autoridades no hacen su trabajo como deberían, pero tampoco seamos parte del problema de llenar las calles de basura, quemar o destruir, de lo contrario estaríamos siendo parte de las estadísticas del mal social.

Existe un enorme camino por recorrer para poder alcanzar la igualdad, así mismo conocemos los avances y los desafíos, pero también hay que reconocer que vamos por el buen camino, en unidad como sociedad debemos caminar siempre, pero sin violentar los derechos de los otros.

Si de luchar se trata, soy aliado de ellas, porque al apoyarlas apoyo a mi madre, esposa, hermana y demás familiares a tener una vida digna, que sus derechos sean tomados en cuenta y sobre todo que caminen con total libertad.

Twitter: @pipemx