En Mercedes se jugarán su última carta en lo que resta de la temporada, con la última actualización que tendrá el W13 y que recientemente anunciaron. Los alemanes tienen como objetivo para el cierre del campeonato el ganar, por lo menos uno de los cuatro Grandes Premios que le restan al calendario.
La última actualización verá la luz en Austin, Texas, para lo que será la siguiente fecha de la #Formula1 en el Circuito de las Américas. Una pista en la que no les fue del todo bien el año pasado, pero en la que esperan que sus coches puedan ser más que funcionales en su rendimiento, desde los Ejercicios Libres del viernes de ese fin de semana.
La apuesta está en un paquete aerodinámico que tenga menor peso que el actual monoplaza, y con el que puedan ser más competitivos y mejorar sus prestaciones en cuanto a tiempos en el trazado. Si todo les sale como lo planean, podremos ver a los de las Flechas Plateadas dando unas buenas sesiones de Libres, para pasar a la Qualy con la confianza de hacer un gran papel.
Justo el problema de los Mercedes, se da en esa parte del fin de semana de Gran Premio. En la sesión clasificatoria, en ocasiones suelen estar muy cerca de los Ferrari y los Red Bull; por otra parte, ha habido fines de semana en los que a pesar de estar en el top diez de la parrilla de salida, han quedado muy lejos de los dos equipos que en algún momento del año, lucharon de tú a tú por el campeonato.
A diferencia de Ferrari, en el equipo alemán cuentan con dos pilotos que no suelen cometer muchos errores. Claro está que la experiencia de un heptacampeón del mundo, como lo es Hamilton, da la garantía de ello, al casi nunca equivocarse; además, en el caso de George Russell, y a pesar de su juventud y de ser este su primer año en el equipo, luego de su paso por Williams, ha dejado muy en claro que es un piloto consistente y que tampoco suele cometer errores en su conducción.
El problema de Mercedes es que nunca tuvieron el coche ideal en la temporada 2022, incluso, desde el mismo momento de su desarrollo, antes de arrancar el campeonato. En cambio, en Ferrari sí que tuvieron el mejor coche de la parrilla, pero fueron sus errores de garaje, aunados a las equivocaciones de sus pilotos, los que tienen al equipo de Maranello compitiendo con Mercedes y no con Red Bull, como lo dictaría el escenario ideal.
En pocas palabras, en Mercedes ya hubieran querido tener un auto tan competitivo como el Ferrari, para muy seguramente estar a la par de los Toros Austríacos. La actualización que tendrá su W13 en el #GranPremioDeLosEstadosUnidos, quizás les funcione para acercarse a su objetivo de ganar una carrera este año y no irse en cero en ese aspecto; el problema es que ya solo les quedan cuatro oportunidades para poder lograrlo.
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