IRREVERENTE

¡Castigo a las termitas de la libertad de expresión!

López Obrador propuso eliminar la iniciativa ley de la legisladora morenista Benelli Jocaneth Hernández que buscaba incrementar el monto de la multa para castigar a quien injurie al presidente.

En su mañanera de este viernes, Andrés Manuel dijo que no se necesita una ley que multe a las personas que lo insultan.

“¡Libertad de expresión!”, proclamó desde el púlpito.

Sus monaguillos agitaron dos veces las campanillas del “templo mayor” y a partir de ese momento los acólitos de la 4T le pararon a las arengas que habían empezado a excretar -que no expresar- en redes, chats y chales políticos, económicos y sociales que pululan por doquier.

Ya es formal: el presidente derogará la disposición contenida en el Artículo 33 de la Ley sobre Delitos de Imprenta.

“Ya me enteré de que fue una diputada de Morena la que propuso lo del aumento de la multa a los que insulten al presidente y lo hizo sin malas intenciones, pero lo que debe hacerse con esa ley es eliminarla”, sostuvo durante su visita a Sonora.

Pero no resistió la tentación de expresar esto:

“Claro que no estoy pidiendo que me insulten, pero no vamos nosotros a enjuiciar a nadie por eso. Hay derecho a la crítica”.

Y luego vino su infaltable de historia con que suele aderezar sus proclamas:

“Por eso metieron a la cárcel a Madero; la primera vez por insultos a la autoridad y lo del 89 tuvo que ver también con eso. Lo vamos a derogar”, reiteró.

Antecedente

E proyecto de decreto que provocó esta reacción en el presidente fue aprobado por la Comisión de Gobernación y Población de la Cámara de Diputados -que preside el priyista Alejandro Moreno Cárdenas, la tarde del pasado 14 de febrero.

Dicha iniciativa buscaba reformar varias disposiciones de la Ley sobre Delitos de Imprenta, para actualizar las multas establecidas en pesos, para que sean cuantificadas en UMAS, Unidades de Medida y Actualización.

El “castigo” actual por incurrir en ese delito es de 103 pesos y 74 centavos.

¡Santa madre del Dios de Spinoza!, como para arruinar a cualquier “delincuente” que se atreva a cometer semejante agravio a dicha ley.

Con esos “descomunales” montos de la pena económica, habrá muchos -habremos, kimosabi- que estén dispuestos -estemos- a ser “fichados” con tal de tapizar de insultos:

· Al presidente.

· A su gabinete formal y ampliado.

· A sus correligionarios variopintos.

· A los acólitos que propagan la palabra del presidente.

· A los emBOLAdos que muerden la mano de los panistas que los alimentaron durante dos sexenios y hoy matan por la 4T.

· A los juniors de angora que abandonaron a sus mamás en San Pedro por irse a disfrutar del american way of life de San Antonio y desde allá defender cual solovinos sin correa a Andrés Manuel.

· A las tránsfugas del anafre a quienes se les queman los frijoles por andar en el argüende chalero y chatero.

· A las meretrices pro-bono pro-4T que medran en las redes.

· A quienes se tiran día, madrugada y noche desde las atalayas de los chats, los twitts y otras redes, envueltos en la bandera de Morena.

Total, ¿qué tan caro nos va a salir el asunto con multas de 103 pesos y 74 centavos?

CAJÓN DEL SASTRE DE PANAMÁ.

“¿Por qué no una iniciativa de ley contra hacer el ridículo y otra que castigue a las termitas de la libertad de expresión, esas que ´dan las noticias´ en sus chats, usurpando funciones de medios formales que pagan -que pagamos, kimosabi- impuestos, creamos empleos y corremos el riesgo de hacer empresa en tiempos del cólera… presidencial?”, pregunta la irreverente de mi Gaby.

Libro recomendado para hoy: “El amor en tiempo del cólera”, de Gabriel García Márquez.