¿Qué empresas se anunciaron en TV Azteca, el pasado sábado, durante las seis horas en que esta empresa desinformó, parecería que con propósitos de desestabilización, acerca de la marcha opositora disfrazada de generación Z?

Hice una pequeña y rápida investigación acerca de qué anuncios comerciales, TV Azteca pautó entre los numerosos reportes cargados de falsedades, que dos canales abiertos de la televisora difundieron durante tanto tiempo y que, insisto, parecerían haber sido realizados con el objetivo de convencer al público de la necesidad de un golpe blando contra un gobierno, el de la presidenta Sheinbaum, democráticamente electo.

Varias empresas anunciantes, ¿sin darse cuenta o sin ser consultadas?, ¡en el mejor de los casos en forma involuntaria!, patrocinaron lo que parecería, reitero, un llamado a apoyar un golpe blando.

En efecto, parecería un esfuerzo mediático desestabilizador. Lo afirmo por el tono de las notas, absoluta y perversamente desfavorable al gobierno constitucional, pero sobre todo por los mensajes de redes sociales, tan cargados de resentimiento, del dueño de TV Azteca, Ricardo Salinas Pliego.

I. Anunciantes de Azteca Uno, el sábado 15 de noviembre

Las columnas más leídas de hoy

Meli +. Suscripción premium de Mercado Libre que ofrece beneficios exclusivos para mejorar la experiencia de compra y pagos dentro del ecosistema de la plataforma.

Home Depot. The Home Depot es la cadena de productos de mejoras para el hogar más grande e importante del mundo.

Flanax. Medicamento antiinflamatorio no esteroideo de venta libre que se utiliza para aliviar el dolor, la inflamación y los cólicos. Pertenece a la empresa farmacéutica multinacional Bayer.

AT&T México. Empresa de telecomunicaciones, subsidiaria de la multinacional estadounidense AT&T.

Bodega Aurrerá. Cadena de tiendas minoristas propiedad de Walmart.

Walmart. Una de las empresas más grandes del mundo.

UVM. Universidad perteneciente a Laureate International Universities.

Pañales Huggies. Empresa especializada en el “desarrollo integral del bebé”. Es propiedad de Kimberly Clark.

Banco Azteca. Propiedad de Ricardo Salinas Pliego.

Coppel. Propiedad de la familia Coppel.

Sams Club. Propiedad de Walmart.

II. Anunciantes de adn40

Cámara de Diputados y Diputadas, invitando al concierto de la orquesta sinfónica de SLP.

Amazon. Gigante del comercio electrónico.

Afore Profuturo. Administradora de fondos para el retiro.

Crackets (galletas)/ Gamesa/ Pepsi Co. Líder mundial en alimentos y bebidas de conveniencia.

Walmart.

Elektra. Propiedad de Salinas Pliego.

Sams Club.

Banco de México. Banco central del Estado mexicano.

Suprema Corte de Justicia de la Nación. (Por cierto, la vandalizaron los violentos que según TV Azteca fueron agredidos por el Estado).

Trivago. Metabuscador que compara los precios de hospedajes y las ofertas que nos proporcionan diversos sitios de reservaciones en línea.

¿Consultó TV Azteca a todas estas empresas?

Sería gravísimo, en términos de ética informativa y comercial, si se pautaron los comerciales sin conocimiento de las empresas.

Pero sería todavía más grave la situación si las compañías fueron consultadas y autorizaron participar en el ataque mediático más vulgar que ha recibido un gobierno democrático en México.

De ahí que, entre tantas noticias exageradas y aun falsas evidentemente dirigidas a sembrar odio y miedo, no resulta irresponsable, sino preocupante, decir que ese parecería ser un llamado mediático al golpe blando. Que respondan los directivos de las empresas.

¿Qué es el golpe blando?

“Las guerras mediáticas son un mecanismo de desprestigio, manipulación y desestabilización”. Esta fue una de las conclusiones del coloquio internacional Las guerras mediáticas en América Latina: actores, intereses y alternativas celebrado en noviembre de 2022 en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM.

El tema se ha estudiado bastante. Lo ha hecho, por ejemplo, Rafael Barajas El Fisgón, un destacado politólogo que expresa sus puntos de vista, muy serios, con viñetas humorísticas en La Jornada y El Chamuco. Este analista identifica cinco etapas de un golpe de Estado blando...

Antes de precisar tales etapas debemos decir que el golpe blando se diferencia del golpe de Estado duro en que busca el derrocamiento ilegal, de un gobierno democráticamente electo sin el uso de la fuerza militar, solo con tácticas de desestabilización que invariablemente empiezan con la manipulación mediática, desde luego financiada con muchísimo dinero y que resulta posible debido a la complicidad de los grupos fácticos de poder empresarial con los grandes medios de comunicación.

Rafael Barajas identifica cuatro etapas de un golpe de Estado blando: (i) Desprestigio. (ii) Guerra mediática y fake news. (iii) Calentamiento de las calles. (iv) Ruptura institucional. ¿En cuál estamos en México? ¿Qué papel están jugando los medios, particularmente TV Azteca?

Para aportar contexto cito a la inteligencia artificial de Google: "Los medios de comunicación son cruciales en los golpes de Estado blandos porque desinforman y crean un clima de opinión favorable a la desestabilización del gobierno“. Lo intentan a través de campañas de desprestigio, noticias falsas, y la manipulación de la información.

La desinformación pretende, sobre todo, “generar descontento y una percepción negativa del gobierno o sus funcionarios”. Su principal estrategia es la siembra de miedo y odio para polarizar a la sociedad.

Construir una narrativa de ingobernabilidad es lo que se busca con la combinación de dos factores: (i) fuertes campañas mediáticas de desinformación y (ii) acciones de violencia callejera que solo sirven para darle espectacularidad a las noticias falsas.

El papel de los medios manipuladores es fundamental para acusar al gobierno democrático de ser totalitario o, como el pasado sábado, de ser un narcoestado. Terrible e inmmoral calumnia.

Comenté aquí, sobre la llamada marcha de la generación Z del 15 de noviembre, que no se trató de una protesta juvenil, sino de una manifestación, no muy concurrida —alrededor de 20 mil personas—, organizada por los partidos de oposición y transmitida, algo nunca visto, por dos cadenas nacionales de televisión abierta, las de TV Azteca.

El propietario de esa televisora, en plan de activista muy radical, dijo temprano el sábado, antes de que la gente llegara al Zócalo:

1.- “Cobertura en vivo en todos los canales de TV Azteca. Nuestra idea es salvaguardar, a través de nuestras cámaras, a todos los jóvenes que fueron a decirle al Narco Estado que ya están hartos de su impunidad y corrupción, de la gente que mandan desaparecer y de su clara asociación con el crimen organizado”.

2.- “¿La presidenta les irá a garantizar su seguridad y libertad de expresión, o los va a mandar reprimir y violentar con sus grupos de choque, gas lacrimógeno y granaderos?”.

Salinas Pliego prometió cobertura en vivo y cumplió. Tanto Azteca Uno como adn40 transmitieron de diez de la mañana a cinco de la tarde la marcha de la supuesta generación Z —que, como sabemos, se organizó para golpear con una enorme dosis de perversidad a la presidenta Claudia Sheinbaum, no solo con mentiras en las mantas, las cartulinas y los clásicos coros de consignas, sino también con acciones muy violentas en la calle–.

No debe permitirse que el proyecto de desestabilización siga adelante.