¿Y si en lugar de prometer, un gobierno se dedicara a cumplir… y a superar lo prometido? En Nuevo León eso de cumplir, entregar cuentas, y convencer a la gente no sólo son hipótesis, y es que mientras la oposición se agota en sus poco elaborados discursos y frases con el fin de imponer agenda en las redes sociales, la realidad acumula algo que les incomoda mucho más. Resultados medibles, visibles y con respaldo ciudadano. Porque no se trata de campañas mediáticas, sino de acciones concretas que están cambiando la forma en que se vive, se trabaja y se respira en el Estado.
Ahí está el Plan Maestro de Movilidad, recientemente actualizado por la administración del gobernador Samuel García, que no es un archivo olvidado, postergado por décadas en un cajón, sino una estrategia en ejecución. Nuevas líneas de Metro, transporte eléctrico de última generación, parques lineales y una visión de ciudad más justa y eficiente que rompe con décadas de rezago. En Nuevo León se están levantando estructuras, de esas que perduran y se vuelven símbolos para las grandes ciudades. Y todo esto no sólo con el objetivo de lucirse en el Mundial 2026, sino de dejar un legado para la ciudadanía de una urbe cuya naturaleza industrial requiere de un sistema de transporte masivo digno y eficiente, además claro de colocar al estado entre los líderes en movilidad en América Latina. Entonces resulta curioso que el único argumento de la oposición, sin reconocer su abandono en la materia sea el tráfico que provocan las obras. Para hacer un omelette hay que romper algunos huevos, pero los resultados se disfrutarán por décadas..
Por otro lado en lo referente al medio ambiente, la creación de la División Ambiental —única en el país— marca un precedente. No se trata de una oficina decorativa, sino de un equipo operativo que sanciona, clausura y exige a la industria que cumpla con estándares para garantizar aire limpio, ríos libres de descargas y entornos saludables. Es la prueba de que el desarrollo económico y la sostenibilidad no son enemigos, siempre que haya voluntad política y coordinación. Y habría que darle el merito justo que merece, porque la realidad particular de la relación Industria- Estado no es el mismo que en el resto del país, ya sea por historia, desarrollo, concentración y ubicación, por lo tanto el hecho de impulsar un modelo que armonice el desarrollo económico, pero también ecológico no es poca cosa.
Otro de los temas clave en los que a la oposición se le agotan los argumentos es en lo referente a la seguridad. Y es que luego de prácticamente dos décadas desde que las administraciones del PAN y el PRI, impulsaran una “guerra contra el narco”, los datos hablan por sí mismos, registrando el mes de julio con el menor número de homicidios dolosos en siete años, sacando a Nuevo León del top de los Estados más violentos y devolviendo a la ciudadanía la sensación de seguridad que parecía perdida.
Y aún en medio de las recientes tribulaciones provocadas por la violencia con el vecino país del norte en el terreno económico, el reciente Memorándum de Entendimiento con Laredo y Green Corridors proyecta inversiones históricas por 17 billones de dólares en proyectos estratégicos como Talise y Gateway Industrial Park. Esto no solo fortalecerá el Puente Colombia —que pasó de 800 a 10 mil cruces en apenas tres años—, sino que convertirá a la frontera de Nuevo León en un nuevo motor logístico de la región. Así, mientras algunos siguen intentando instalar la narrativa de que “todo está mal”, los hechos, las obras y los indicadores cuentan otra historia. Pero aquí lo más importante, es que la gente lo ve, lo vive y lo aprueba. Y de cara al proceso electoral del 2027, esa combinación de resultados y legitimidad será un muro difícil de escalar para quienes sólo saben criticar sin construir, así que en este momento de ajustes en los que la oposición debe saber jugar sus cartas ante un movimiento de regeneración nacional cada más desgastado, es importante observar los modelos emergentes que entregan resultados a la gente.