La aviación es tan apasionante, porque es un constante subir y bajar de emociones, y es el caso de Aeroméxico, que ha anunciado su regreso a la Bolsa Mexicana de Valores, S.A.B. de C.V. (BMV) y a la Bolsa de Valores de Nueva York (New York Stock Exchange; NYSE), a través de las acciones que llevarán por nombre AERO.
A través de un comunicado, Aeroméxico informó lo siguiente:
“Grupo Aeroméxico, S.A.B. de C.V. (Aeroméxico) anunció hoy los resultados de su oferta pública mixta global de 27,463,590 acciones a un precio de MXN $35.34 por acción en México (la Oferta en México) y de 11,727,325 American Depositary Shares (ADS) a un precio de EUA $19.00 por ADS en los Estados Unidos (la Oferta Internacional y en conjunto con la Oferta en México, la Oferta Global). Cada ADS tiene como valor subyacente 10 acciones de Aeroméxico.
“Las acciones de Aeroméxico iniciarán su cotización en la Bolsa Mexicana de Valores, S.A.B. de C.V. (BMV), y los ADSs iniciarán su cotización en la Bolsa de Valores de Nueva York (New York Stock Exchange; NYSE), el 6 de noviembre de 2025 bajo la clave de pizarra AERO. La Oferta Global se liquidará y concluirá el 7 de noviembre de 2025, sujeto a condiciones de cierre habituales. Se hace del conocimiento del público inversionista, que las cotizaciones citadas, podrán iniciarse después de la apertura, para cotización, de cada una de la BMV y el NYSE.”
Medios especializados informaron que las acciones tuvieron una subida -tal y como lo registra Investing.com- “un 0,84% en su debut en la Bolsa de Nueva York el jueves, valorando a la aerolínea más grande de México en casi 2.800 millones de dólares”.
Este movimiento por parte de la aerolínea va enfocado a fortalecer la empresa. Y sobre todo en estas épocas de incertidumbre hay que tomar muy bien las decisiones, y una de ellas va enfocada a seguir ampliando su flota. Este punto es importante, porque le permitirá abrir más rutas y expandirse hacia otros mercados, que logrará solo si tiene más flota disponible.
Ampliar su flota es un punto que me parece sumamente interesante, y es una decisión que va acompañada de otros dos rubros, el primero es el reemplazamiento de equipos, esto es, sacar los aviones de mayor antigüedad y traer nuevos, que le permite a la aerolínea gestionar ahorros importantes, tanto en mantenimiento como en combustible.
No se nos olvide que, actualmente, el gasto más fuerte que hace una aerolínea es precisamente en el pago de la turbosina, SAF o ambas. Cerca del 40% del gasto operativo se va a ese rubro. Conforme se puedan ir actualizando los equipos, los ahorros que se logren generar serán muy importantes.
Y el otro punto es el mantenimiento, mientras más nuevas las aeronaves, menos mantenimiento requieren, lo cual trae como consecuencia ahorros en el manejo de la aerolínea.
Son puntos en los que se enfoca Aeroméxico, sin descuidar otros aspectos, pero me parece una inteligente estrategia seguir ampliando su flota. Todavía está pendiente la decisión de si su alimentadora Aeroméxico Connect seguirá operando aviones Embraer, o tienen en puerta otra oferta “seductora” para los vuelos de esta aerolínea.
Los aviones de fabricación brasileña han sido garantía, pero no puedo olvidarme que Airbus les propuso cambiarse al A220; si me preguntan a mí, amante de los aviones de fabricación francesa de Airbus, tengo que reconocer que el nuevo Embraer E2 es una “chulada”; tal vez les convendría dar el salto al E 195-E2, tan solo por el ahorro de combustible, que es hasta de un 25%.
“Ahorrar” ha sido una razón de peso por la que Aeroméxico se ha decantado por seguir adquiriendo aviones de la familia MAX de Boeing, por el ahorro de combustible que generan estas aeronaves de última generación, además de otras características que hacen más agradables los viajes para los pasajeros.
Por ejemplo, los Boeing 787 Dreamliner, que traen un equipamiento especial para reducir la sensación del “jet-lag” en el viajero. Precisamente estos modelos de avión se han integrado muy bien en la flota del Caballero Águila.
No nos extraña que Aeroméxico se siga renovando en aras de proporcionar a sus clientes una mejor experiencia de viajar. Desde la modificación de sus mostradores en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), su área “Premier One” y “Clase Premier”, así como la renovación de sus salas VIP, en el aeropuerto de Mérida y ahora en el AICM.
Para Aeroméxico es importante proporcionar una buena experiencia de viaje para sus clientes, para que desde tierra empiecen a experimentar trato exclusivo y se emocionen al viajar con ellos, creando un lazo de lealtad.
Se los digo por experiencia porque tengo familiares que, si no es por Aeroméxico, ellos no viajan. En parte porque usan sus programas de lealtad y aprovechan los “up-grades”, y se sienten orgullosos viajando por la aerolínea bandera del país.
Enhorabuena al Dr. Andrés Conesa y sobre todo a los trabajadores de Aeroméxico que hacen posible el regreso a cotizar en las bolsas de valores. Que esto sea el comienzo de un fortalecimiento de la línea aérea, y se vea traducido en mejoras tanto para los usuarios como para sus colaboradores.



