“De lo temible desciéndese poco a poco hasta lo despreciable”.
Dionisio Longino
“No desear nada es no vivir”
Paul Géraldy
Cambio de año, nuevas ilusiones y renovadas esperanzas. En ocasiones estas son similares a lo que anhelan nuestros políticos; otras más, lo que idealmente se esperaría es que dichos políticos cambiaran su pensar y su accionar. Nada nuevo, así ocurre en democracia…
Apenas ayer, López Obrador compartió tenía tres deseos para el 2022: el fin de la pandemia (¡qué bueno que ya no le viene cómo anillo al dedo!); fortaleza cultural (quien sabe qué quiso decir con eso, seguramente fue un guiño para su esposa, la señora Gutiérrez Müller) y menos pobres (magnífico deseo, ya era hora; nótese que los programas de bienestar social de su gobierno solo han aumentado el número de mexicanos en situación de pobreza).
El ex chico maravilla llamado Ricardo Anaya ha pedido que los Reyes Magos nos traigan órganos de justicia que no se usen para perseguir opositores ni tampoco al árbitro electoral (me pregunto si realmente lo quiere para México o solo habla a título personal…).
Esos son los deseos que la prensa recogió ayer en sus páginas y de los que las redes hablaron copiosamente. Mas seguramente en el transcurso del día tendremos otros políticos en escena deseando cosas buenas para el país y para todos nosotros.
En mi caso, como sé es el caso de mucha más gente, trataré de comerme las uvas sin atragantarme; tengo también una lista de buenos deseos particulares y para el bien de nuestro país. No los voy a aburrir con ello, apreciados lectores.
He decidido, mejor, ilustrar en este espacio con doce casos de impresentables miembros o simpatizantes de la 4T; todos, en mi opinión, debieran estar mejor muy lejos de la administración pública y de la influencia mediática. Algunos incluso tras las rejas. Así, el transcurrir de la vida nacional sería más sana. Aquí mi lista; las razones acompañan a tan deleznables individuos:
1.- Hugo López-Gatell, también conocido como “Dr. Muerte”. Responsable de 299 mil 132 fallecimientos por Covid (según cifras de la subsecretaría de la que es titular) que pudieron haberse evitado. Otros números —también oficiales— hablan de 600 mil decesos; eso y casi cuatro millones de infectados del virus. Entre otras cosas, se ha resistido a implementar masivamente tres medidas: utilizar el cubrebocas; realizar pruebas de detección; vacunar al mayor número de personas (incluyendo niños entre 5 y 17 años de edad). Como médico que es, ello resulta indefendible.
2.- Los responsables del desabasto de medicinas, material de salud y tratamientos en nuestro país. Son varios, que al igual que el zar anticovid, han sido a lo menos negligentes. Deben ser procesados en México y ante instancias internacionales. Los datos fríos son los niños que han muerto de cáncer por no haber conseguido sus medicamentos a tiempo o las personas cuyo nivel de vida se deterioró, pero hay muchas otras cifras.
3.- Alejandro Gertz Manero, titular de la recientemente creada FGR. Ello sencillamente debido a que ha puesto la procuración de justicia al servicio de sus veleidades y venganzas, así como a las del presidente de la República. Capaz de perseguir científicos y amenazar con encarcelarles mientras el país sufre la peor ola de violencia. Inamovible y no por ser un ente autónomo. ¿Qué ocurre o qué información guarda que la misma SCJN es incapaz de atraer el caso de Alejandra Cuevas y que el poder legislativo no quiere fincarle juicio político?
4.- María Elena Álvarez-Buyllá, directora del Conacyt. Más bien pareciera la emisaria encargada de dinamitar el quehacer científico y tecnológico en nuestro país (por marginal que este fuera de por sí). Perseguir científicos, imponer rectores, vulnerar instituciones y odiar todo lo que signifique conocimiento más allá de ideologías. Por condenar a una importante parte de la población —mucha de ellas de escasos recursos— a no poder seguir desarrollándose.
5.- Rocío Nahle y Manuel Bartlett ya que, con fines ideológicos y económicos, cierran la posibilidad de que nuestro país sea eficiente y económicamente viable en el ámbito de la generación, distribución y venta de energía. Debido a que condenan a nuestro país a una mayor contaminación, a precios de energía elevados, a la pérdida de competitividad. ¿Todo para qué? Para manejar monopolios quebrados mientras le mienten a la población.
6.- Rosario Piedra Ibarra, una de las decepciones del régimen —quizá la mayor. Y no porque se esperara mucho de ella, tan solo porque siempre se representó como una defensora de los derechos humanos y al momento de ser quien lleva dicha oficina, se convirtió en tácita de los violadores de estos.
7.- Elizabeth García Vilchis, quien dirige el espacio “Quién es quién en las mentiras de la semana”, de los miércoles en las mañaneras. Se dedica a propagar mentiras y cobrar por ello. Poco le importa mancillar honorabilidades o ahondar las diferencias en nuestro país.
8.- Aunque López Obrador asevera no tener porristas ni periodistas dispuestos a modo, los paleros que lo secundan prácticamente todas las mañanas. Carlos Pozos, Lord Molécula; Paul Velázquez, alias El pirata falso; Sandy Aguilera, y demás merolicos que participan el las conferencias de prensa y que desvirtúan el debate público, la rendición de cuentas y la labor crítica y objetiva a la vez del verdadero periodismo.
9.- Padre Solalinde. No pertenece a Morena, pero pareciera. Y no por su maldiciente idea de ponerle a una representación del Niño Dios una peluca tipo para hacerlo parecer a López Obrador, tampoco por decir que el tabasqueño tiene rasgos de santidad. La razón principal radica en abandonar a su suerte a los migrantes, a todos ellos que decía defender. Los tiempos cambian, pero las atrocidades se siguen cometiendo, y él ha optado por callar.
10.- Sergio Gutiérrez Luna, actual presidente de la Cámara de Diputados. Eso de marearse con el poder y usar el garrote penal para amedrentar a los consejeros del INE que votaron a favor de posponer los preparativos para la consulta popular de revocación del mandato presidencial. Además de olvidar la división de poderes, ahoga en el fango de la grilla la autonomía del Poder Legislativo.
11.- Cuitláhuac García, gobernador de Veracruz, quien navega en la política y a cargo de su administración local con el beneplácito de AMLO -al igual que muchos en esta lista-. Conocido por encarcelar sin pruebas a opositores a su régimen. El último caso: el secretario técnico del Senado, el José Manuel Del Río Virgen.
12.- Andrés Manuel López Obrador. Por todo lo anterior sumado. Por tener, además, a esos subordinados y colaboradores, todos ellos ruines y cínicos, y no tomar cartas en el asunto. Por pasar por alto pronunciamientos y acciones intolerables a simpatizantes.
Lástima que con el cambio de año la gente no mute en automático también. Duele saber que usan o han usado sus puestos o su posición de privilegio para burlarse, practicar revanchismos, acrecentar sus fortunas y lastimar más a la población mexicana.
Como sociedad, como ciudadanos, como mexicanos, debemos exhibir la inmundicia y demandar nuevas y mejores políticas públicas, acciones, programas, autoridades y encargados.
Es posible, si bien el camino no es fácil.
¡Feliz año nuevo! Se les desea lo mejor.
Verónica Malo en Twitter: @maloguzmanvero