En los dos primeros años de gestión del gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO), el Servicio de Administración Tributaria (SAT) anunció que ha recaudado 736 mil millones de pesos de adeudos de los contribuyentes, de los cuales 43% correspondió a grandes contribuyentes; 41% a fiscalización y comercio exterior; 6% a cobranza coactiva y 10% a eficiencia recaudatoria.

De acuerdo con un comunicado del SAT, tal recaudación fue posible gracias a la modificación del artículo 28 Constitucional con lo cual se logró prohibir la condonación de impuestos que, en las dos administraciones anteriores, sumaron un total de 413 mil millones de pesos.

El SAT señaló que a partir del 2020 se equiparó a la defraudación fiscal con la delincuencia organizada y se modificó la compensación universal, esto con el fin de abatir la evasión y elusión fiscal, lo cual generó “una percepción de justicia”, misma que motivó a los contribuyentes a ponerse al corriente con sus deudas.

El organismo recaudador de impuestos puntualizó que durante la pandemia de Covid-19, los esfuerzos de recaudación tributaria permitieron alcanzar una recaudación adicional de 467 mil millones de pesos durante 2020, equivalente a un 2.3% del PIB, mismo porcentaje de ingresos adicionales similares a los obtenidos con la reforma fiscal de 2014.

“Esto permitió mantener los ingresos tributarios al mismo nivel en términos reales a los del año anterior”

SAT

De acuerdo con el documento, la calificadora Fitch ratificó el grado de inversión para la deuda soberana de México indicando que “los ingresos tributarios han sobrepasado las expectativas y las autoridades han podido disminuir la contratación de deuda en 2020”.

Asimismo, el Fondo Monetario Internacional indicó en la evaluación anual que realiza a México que la respuesta fiscal del SAT ha sido positiva y un valor atípico comparada con los otros países de América Latina y del G20

Finalmente, el SAT indicó que las evaluaciones que se le han realizado por organismos internacionales y calificadoras también reconocieron que la estrategia de recaudación tributaria permitió garantizar los recursos suficientes para el sector salud durante la pandemia del Covid-19, así como para los programas sociales y prioritarios durante la crisis.