Las pérdidas sufridas en las operaciones por JPMorgan Chase se dispararon en los últimos días en al menos mil millones de dólares más, superando la estimación inicial del banco de dos mil millones de dólares, reveló hoy The New York Times.

 

El periódico indicó que en los últimos cuatro días se aceleró el deterioro de la posición del banco, ya que los inversionistas se aprovecharon de sus problemas.

 

Cuando el pasado 10 de mayo, el presidente ejecutivo de JPMorgan, Jamie Dimon, anunció las pérdidas del banco indicó que esas podrían duplicarse en los próximos trimestres.

 

Sin embargo, dicho proceso se aceleró en cuatro días de operaciones comerciales a medida que los fondos de cobertura y algunos inversionistas se aprovecharon de la situación de JPMorgan, lo que apresuró el deterioro de la posición en el mercado crediticio del banco.

 

Un portavoz del banco declinó hacer comentarios, aunque Dimon dijo que las pérdidas totales de las transacciones serían volátiles en función de las fluctuaciones del mercado del día a día.

 

La Reserva Federal analiza el alcance de las pérdidas crecientes y la original.

 

Además investiga el hecho de que la oficina del jefe de inversiones de JPMorgan tomó riesgos que eran inapropiados para una institución depositaria y asegurada por el gobierno federal.

 

Las fuentes del diario, que pidieron condición de anonimato debido a que hay una investigación en curso, indicaron que el estado general del banco sigue siendo fuerte, pese a las pérdidas adicionales.

 

JPMorgan ha logrado incrementar sus dividendos en acciones más rápido que sus rivales debido a sus fuertes ingresos y a unas reservas de capital más sólida.

 

Sin embargo, las enormes pérdidas comerciales sacudieron a Wall Street y reavivaron el debate sobre qué tanto las gigantescas instituciones financieras deben ser reguladas.

 

Los directivos del banco analizan el impacto de las pérdidas en las ganancias futuras, pese a que por ahora un recorte de dividendos sigue siendo muy poco probable.

 

En marzo, la compañía elevó el dividendo trimestral de cinco centavos de dólar, a 30 centavos de dólar, lo que le costará al banco alrededor de 190 millones de dólares más este trimestre.