Con poco uso de cubrebocas y en un lugar cerrado, el mandatario Donald Trump volvió a llevar a cabo un acto de campaña, poniendo en riesgo a todos los asistentes en plena pandemia de Covid-19.

Mientras que Estados Unidos se acerca a los 200 mil fallecidos a causa de la pandemia y a los 6 millones 750 mil infectados, siendo dicho país el principal foco de infección en el mundo, Trump decidió hacer caso omiso y procedió con el evento, el primero realizado desde el celebrado en julio en Tulsa, Oklahoma.

Al menos una “celebridad” republicana, Herman Cain, falleció posterior a su asistencia a dicho evento y se especuló si adquirió el coronavirus en dicho acto de campaña.

El evento de Oklahoma fue señalado como una de las causas de un repunte de los casos de la enfermedad en dicho estado.

Sin embargo un Trump desafiante (aunque rodeado de personas con cubrebocas) advirtió que no se volverá a colocar a Estados Unidos en cuarentena.

Trump no mencionó durante su discurso las mil vidas diarias que en promedio se pierden en los Estados Unidos en el mrco de la pandemia.

La única medida de “seguridad” fueron chequeos de temperatura en la entrada y la “sugerencia” de portar cubrebocas, misma que fue ignorada por la mayoría de los asistentes, según reporta AP.