México.- Con una permanente sonrisa en el rostro y los dedos pulgares levantados en señal de triunfo, salió ante las cámaras de televisión, en instalaciones de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) en el Distrito Federal, Ramiro Pozos González, alías “El Molca”, a quien las autoridades identifican como líder de la organización delictiva “La Resistencia”. 

La SSP informó que el sujeto es investigado por secuestro, homicidio y delitos contra la salud y su captura se dio en el municipio de Metepec, estado de México, por elementos de la Policía Federal (PF).

A “El Molca” se le atribuyen varios asesinatos en Jalisco, entre ellos el de Carlos Alberto Rayas, jefe de la División de Homicidios de la Procuraduría General de Justicia de ese estado.

"La Resistencia" es para las autoridades una de las responsables de la violencia que impera en el estado de Jalisco, ya que se disputa el control de las actividades delictivas en dicha entidad con el autodenominado Cártel de Jalisco "Nueva Generación".

Según los reportes de inteligencia, Pozos González inició sus actividades delictivas como integrante del extinto cártel del Milenio, organización que dirigían los hermanos Valencia, con quien mantenían extrecha relación convirtiéndose en compadres de Oscar Orlando Nava Valencia, alias "El Lobo", quien le regaló un rifle AK-47 conocido como cuerno de Chivo, bañado en oro dorado y blanco.

"El Molca" conoció en los años 90 a Nazario Moreno González alias "El Chayo" y a José de Jesús Méndez Vargas, alias "El Chango Méndez", líderes de "La Familia Michoacana" pues en ese tiempo todos estos grupos comenzaron sus actividades ilícitas.

El jefe de la división Antidrogas de la Policía Federal, Ramón Eduardo Pequeño García, indicó que el sujeto "La Resistencia" llegó a relacionarse con la cúpula criminal que operaba en ese tiempo el cártel del Golfo con Osiel Cárdenas Guillén y a otros narcotraficantes como Juan José Esparragoza Moreno, alias "El Azul", quien evitó que lo privaran de la vida en el 2002; asimismo conoció a Arturo Beltrán Leyva y a Ignacio Coronel Villarreal, alias "Nacho" Coronel quien lo había mandado matar.