México.- El senador Ricardo Monreal de la bancada del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) busca que se castigue con cárcel la práctica de las cirugías estéticas en mascotas al considerar que dichos procedimientos representan “una forma de crueldad animal”.

De acuerdo con el coordinador parlamentario de Morena, Ricardo Monreal, las cirugías estéticas no corresponden ni con propósitos médicos o curativos dado que su única finalidad es modificar la apariencia de los animales “a capricho” de los cuidadores.

El senador citó que existen dos cirugías estéticas recurrentes: la otectomía para eliminar parcial o totalmente la parte externa y visible de la oreja de un animal, así como la caudectomía, que es la mutilación total o parcial de la cola.

Adicional a ello citó el procedimiento de la amputación de dedos accesorios; lifting para el estiramiento de piel y arrugas; rinoplastias e implantes de silicona; corrección de cejas e imperfecciones en la dentadura y cola; además de la desvocalización para reducir el volumen de maullidos o ladridos en las mascotas.

Ricardo Monreal

Cirugías estéticas en mascotas son crueldad animal: Morena

Ricardo Monreal señaló que las cirugías estéticas no sólo provocan dolor, sufrimiento o alteraciones del comportamiento y estrés postraumático, sino que en muchas ocasiones los procedimientos no son efectuados por personal médico calificado, lo cual genera complicaciones en la salud y vida de las mascotas.

De acuerdo con la iniciativa de Morena, los procedimientos quirúrgicos estéticos corresponden con la definición de crueldad animal, por lo que únicamente se autorizarán operaciones por motivos médicos o para impedir la reproducción.

Cualquier persona que incurra en dicha práctica, será castigado con una sanción de cárcel que va de los 6 meses a los 5 años, así como una multa que asciende de 17 mil 924 pesos a los 179 mil 240 pesos, sanción que se incrementará a la mitad cuando sea realizada por servidores públicos.

La reforma para prohibir las cirugías estéticas en mascotas tendría que aprobarse en la Ley Federal de Sanidad Animal, la Ley General de Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, además del Código Penal Federal.