México.- Para Javier Sicilia, líder del Movimiento por la Paz con Justicia con Dignidad, las movilizaciones que realizaron jóvenes universitarios este fin de semana fueron una forma de decir a los partidos que no van a aceptar unas elecciones contra trampas, con demagogia, “no con imposición ni manipulación”. 

Entrevistado luego de la primera Cumbre Ciudadana por un México Pacífico y Justo, el poeta envió un mensaje a los jóvenes: que vayan a las urnas

“Si los muchachos votan en blanco o por un partido, ellos lo saben, cada quien tiene su conciencia; por eso es importante que con su participación expresen que ya no vamos a jugar a las trampas ni a la manipulación. Creo que ya se habían tardado y lo han hecho con mucha inteligencia.” 

Indicó que con las manifestaciones lo que están planteando los jóvenes es que las elecciones sean íntegras, pero “eso no va a pasar si no presionamos, no obligamos a que los candidatos tomen agendas ciudadanas y que nos llevan a lo mínimo indispensable que es la paz, la justicia; de lo contrario no vamos a poder rehacer la vida de las instituciones, ya que están muy corrompidas”. 

En la Cumbre Ciudadana se consideró que es fundamental buscar el “empoderamiento” de los ciudadanos para que su opinión incida lo mismo en la política económica que en quitar o poner gobernadores. 

Sicilia dijo que en este foro, en la que participaron cerca de 300 representaciones ciudadanas, que “el corazón de México está desgarrado, la nación esta fracturada, no está polarizada, está hecha pedazos”, por lo que dijo que es urgente recuperar la vida democrática y el gobierno de la gente, por lo que se debe buscar un lenguaje común y rehacer los sentidos y los contenidos políticos y éticos que puedan encarnarse en actos. 

Por su parte, la directora de Causa en Común, María Elena Morera, expuso que “México no puede seguir igual”, pues la violencia, inseguridad, desigualdad y falta de oportunidades que se vive “atentan con desaparecer la esperanza y alegría que nos caracterizan a los mexicanos. Vivimos en un México del miedo”.