México.- El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) colocaron sellos de suspensión de obras en la presa Pilares, ubicada en el municipio sonorense de Álamos, unas horas antes de que el presidente Andrés Manuel López Obrador realice la inauguración oficial del complejo hidráulico.

De acuerdo con el portal de noticias locales La Volanta, autoridades del Centro INAH Sonora señalaron que existen más de 140 grabados rupestres en la zona donde se llevó a cabo la obra, muchos de los cuales ya quedaron bajo el agua.

Por ello, llevaron a cabo un acto de autoridad de suspensión en la presa construida por la Comisión Estatal del Agua y el gobierno estatal, y que este 5 de agosto será inaugurada tras casi una década del inicio de las obras.

Desde el año 2012, agrega la dependencia, ha estudiado la zona que se verá afectada por la presa y determinó que existen varios sitios de interés histórico y cultural.

“Especialistas del INAH registraron 44 sitios, 34 identificados como áreas habitacionales prehispánicas y 11 con presencia de manifestaciones gráfico rupestre”.

Instituto Nacional de Antropología e Historia

INAH y Gobierno de Sonora se comprometen a preservar vestigios arqueológicos en presa Pilares

Horas después de la suspensión, El INAH emitió un comunicado en conjunto con el gobierno de Sonora y la Comisión Nacional del Agua (Conagua) donde anuncian una serie de acciones conjuntas para garantizar del patrimonio histórico en el embalse de la presa Linares.

Entre ellas, se anunció la forma de un convenio entre INAH y Sonora con el que se iniciarán trabajos de conservación en campo a partir del mes de octubre, en un proceso en el que la Conagua proporcionará asesoría técnica.

Además, reconocen que los asentamientos humanos localizados en la zona “cuentan con una larga y continua ocupación, que se prolonga desde la época prehispánica hasta nuestros días.”.

“Los sitios habitacionales prehispánicos, manifiestan la interacción de los antiguos habitantes con el río, desde su cosmovisión, su patrón de asentamientos, tradiciones productivas y su conformación social”.

Finalmente, el texto señala que el Gobierno de México “continuará atendiendo las necesidades de la población, sin descuidar la conservación del patrimonio cultural e histórico que nos distingue ante el mundo”.