México.- Cinco víctimas del desalojo perpetrado por elementos de la Policía Federal ocurrido el 19 de junio tienen balas incrustadas en el cuerpo pero no ponen en riesgo su vida, a juicio de la Secretaría de Gobernación.

Roberto Campa, subsecretario de Derechos Humanos de la Segob, indicó que en uno de los casos se extrajo un proyectil alojado en el maxilar de una de las víctimas y actualmente permanece en cadena de custodia de la Procuraduría General de la República.

"Se convino con ellos y con la Defensoría de los Pueblos de Oaxaca, mantener en cadena de custodia ese proyectil", dijo el funcionario federal.

De los lesionados con balas o proyectiles incrustados en el cuerpo el funcionario dijo que médicos recomendaron no extraerlos.

"Hay cuatro personas más con proyectiles en el cuerpo, los médicos les dieron una explicación detalla a cada persona en donde les explicaron que la recomendación médica es no extraer esos proyectiles pues no están cerca de venas o nervios que pudieran afectarlos”, señaló.

El subsecretario anunció que la próxima semana visitará el municipio oaxaqueño para entregar expedientes médicos.

El dispositivo implementado por la Policía Federal el pasado 19 de junio dejó un saldo de 8 muertos, 198 heridos de ellos, de ellos 84 fueron heridos por arma de fuego. 

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