Guadalajara.- Moisés Escamilla May, mejor conocido como “El Gordo" May, quien era señalado como líder del grupo delincuencial de “Los Zetas”, fue reportado muerto, víctima de Covid-19, al interior del Penal Federal de Puente Grande, en el municipio de El Salto, Jalisco.

“El Gordo May” llevaba detenido más de 11 años, de una condena de 37 años que le dictó un juez por delitos como delincuencia organizada, portación de armas de fuego de uso exclusivo del ejército, y por su participación en el asesinato de 12 personas, quienes fueron decapitación en el estado de Yucatán.

El ahora occiso tuvo que ser hospitalizado el 6 de mayo pasado cuando comenzó con problemas respiratorios.

Ayer tarde, personal médico del Centro Federal de Reinserción Social, (CEFERESO) número 02, conocido como Penal de Puente Grande, llamaron a los peritos del Servicio Médico Forense debido a que Escamilla May perdió la vida a consecuencia de la enfermedad.

Las autoridades consideraron a Escamilla May como un prisionero modelo, quien no padeció nunca problemas de salud.

Trascendió que la muerte del reo fue contabilizada junto a las otras 48 personas que han perdido la vida debido a la enfermedad en Jalisco.

Cabe destacar que en este mismo reclusorio se atienden a otros 74 reclusos, quienes padecen la misma enfermedad de Covid-19.

En Jalisco, se registran 829 casos confirmados de la enfermedad, aunque el Gobierno Federal sólo reconoce 592. El resto de positivos son aludidos en la estadística como ‘vigilancia comunitaria’, al ser detectados en el operativo Radar Jalisco, de aplicación masiva de pruebas PCR.

El Gordo May” fue capturado junto con ocho cómplices cuando era el encargado de la distribución de drogas, en Cancún, y contaba con la complicidad de policías municipales y civiles quienes le informaban de las acciones policíacas en la zona.