La Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció el uso de vacunas experimentales en contra del virus del Ébola a principios de 2015 en los países afectados del África Occidental.

La OMS colabora con farmacéuticas y reguladores para acelerar el uso de una gama de posibles tratamientos para combatir la enfermedad, la cual carece de cura y ha matado a 2,917 personas.

De acuerdo con la directora general adjunta de la OMS, Marie-Paule Kieny, si los procedimientos son correctos, se comenzarán a emplear las vacunas para enero del próximo año, pero la campaña de vacunación no será masiva debido al reducido número de medicación.

Por el momento, para tratar a los enfermos se emplea un suero obtenido de las transfusiones de sangre de sobrevivientes de la epidemia que ya ha devastado a Guinea, Sierra Leona y Liberia.

Kieny señaló que GlaxoSmithKline comenzó sus ensayos clínicos de la vacuna en Estados Unidos y Reino Unido, pruebas que continuarán en Mali la próxima semana; mientras NEWLINK inicia pruebas experimentales en Estados Unidos y Alemania.