Luego del lamentable tiroteo en una escuela católica de Minneapolis, el secretario de Salud Robert F. Kennedy Jr. culpó a los antidepresivos por los tiroteos en Estados Unidos.
“Muchos de estos antidepresivos tienen advertencias de recuadro negro que dicen que pueden causar ideación homicida o suicida [...] pueden hacerte pensar en matarte a ti mismo o a otras personas”, dijo Robert F. Kennedy Jr.
Sus declaraciones generaron controversia entre las organizaciones de salud, pues advierten que culpar a los antidepresivos puede desviar la atención del problema real; la fácil circulación de armas de fuego.

Robert F. Kennedy Jr. sugiere que los antidepresivos son los culpables de los tiroteos en Estados Unidos; más del 11% de la población adulta consume fármacos
Las declaraciones de Robert F. Kennedy Jr. que buscan culpar a los antidepresivos y a sus consumidores, resultan preocupantes toda vez que alrededor del 11.4% de los adultos en Estados Unidos los consumen.
Sin importar estas cifras, Robert F. Kennedy dijo para Fox News que los Institutos Nacionales de Salud (NIH) abrirán un estudio para evaluar si existe relación entre el consumo de antidepresivos y la violencia en Estados Unidos.



“Nunca antes la gente había entrado a una iglesia o a un aula para disparar. Esto no ocurre en otros países, pasa aquí, y debemos investigar a todos los posibles culpables”
Robert F. Kennedy
Según adelantó el secretario de Salud, los antidepresivos que serán sometidos a estudios son:
- Prozac
- Lexapro
- Zoloft
Sus declaraciones ocurren en medio del tiroteo ocurrido en Minneapolis, donde una mujer trans disparó y asesinó a dos niños de 8 y 10 años, además de herir a otras 17 personas en la escuela católica local.
Menos del 5% de los tiradores en Estados Unidos consumieron antidepresivos
Ragy R. Girgis, investigador de la Universidad de Columbia, contradijo las acusaciones de Robert F. Kennedy Jr. al revelar que apenas un 4 por ciento de personas implicadas en tiroteos habían consumido antidepresivos.
Sin embargo, en su mayoría tienen un factor en común; todos tuvieron fácil acceso a las armas, incluida la propia tiradora implicada en el ataque contra la escuela católica de Minneapolis.
De hecho, la mujer trans, Robin Westman, tenía en su poder un revólver, una escopeta y un rifle, todas armas adquiridas legalmente. Esta situación aviva el debate sobre la portación de armas.
En respuesta, la senadora demócrata Tina Smith, de Minnesota, reaccionó:
“Te reto a que vayas a la escuela Annunciation y le digas a nuestra comunidad que no fueron las armas, sino los antidepresivos los que mataron a los niños. Solo cállate. Deja de decir basura. Deberían despedirte”
Tina Smith
