México.- Una secta religiosa asesinó a una madre embarazada y a sus cinco hijos en una comunidad de Panamá, enterrando a todas las víctimas en fosa común dentro de la comarca indígena Ngäbe-Buglé.

A penas el miércoles 15 de enero, la fiscalía panameña había rescatado a 15 personas heridas y maltratadas que se encontraban secuestradas por presuntos integrantes de la secta “La Nueva Luz de Dios”, quienes les sometían a rituales de exorcismo.

Y este jueves 16 de enero, el Ministerio Público confirmó el hallazgo de 7 cadáveres: seis menores de edad de 1, 3, dos de 9, 11 y 17 años, cinco de los cuales son hijos de la embarazada, cuyo cuerpo se encontró con el de su feto de entre 4 y 6 meses, recoge RPP Noticias.

Madre e hijos fueron torturados antes de su asesinato

Por el asesinato de la familia y el secuestro de otras 15 personas, fueron detenidos diez responsables que habría torturado y sacrificado a sus víctimas, entre los que se encuentra un menor de edad. Los detenidos serán presentados ante el Tribunal de Garantías en Bocas del Toro.

De acuerdo con la Fiscalía de Panamá, la intervención a tiempo de las Fuerzas Especiales de la Policía Nacional, evitó que se produjera la masacre de los 15 secuestrados, además una fuente que cita AFP reveló que uno de los detenidos sería el padre de la mujer embarazada y el abuelo de cinco de los niños que se encontraron dentro de la fosa común.

La politóloga Claire Nevache afirma que el país centroamericano es muy permisivo con su legislación para la instalación de cultos porque el límite está establecido por la moral cristiana y no por el respeto a los derechos humanos, recupera la agencia AFP.