Beigin.- China ha amenazado a 12 reporteros extranjeros de ser expulsados a causa de su cobertura del caso del abogado ciego, Chen Guangcheng, luego que la corresponsal de Al Jazeera fue obligada abandonar el país.

La periodista estadunidense Melissa Chan, con pasaporte estadunidense y hongkonés, abandonó ayer Pekín después de que las autoridades decidieran expulsarla por la emisión de un controvertido documental en el mes de noviembre.

La periodista estadunidense del canal qatarí de noticias Al Jazeera, que transmite en árabe e inglés, fue expulsada tras más de dos años de hostigamiento por su trabajo en el gigante asiático en la primera acción de este tipo en más de una década.

La expulsión de Chan provocó que Al Jazeera -una de las televisiones más influyentes en el mundo árabe-cerrara su corresponsalía en inglés en Pekín, aunque mantuvo a su periodista en lengua árabe, según un comunicado de la cadena.

"Hemos estado haciendo un trabajo de primera clase. Nuestro ADN editorial incluye cubrir todas las historias desde todos los ángulos" , señaló en un comunicado el director de noticias de Al Jazeera en inglés, Salah Negm.

"Esperamos que China aprecie la integridad de nuestra cobertura de noticias y nuestro periodismo. Al Jazeera Media Network seguirá trabajando con las autoridades chinas con el fin de abrir nuestra oficina de Pekín" , afirmó la fuente.

El ministerio de Relaciones Exteriores chino afirmó que la expulsión de Chan se debe al incumplimiento de las reglas y leyes para el ejercicio de la profesión, en declaraciones durante la rueda de prensa celebrada este martes por el portavoz de la cancillería.

Chan, que llegó en 2007 a Pekín, había sido detenida en varias ocasiones, en los últimos años las autoridades la habían amenazado con expulsarla o denegarle la renovación de su permiso de residencia si no moderaba su línea editorial.

Entrevistada por Notimex, Chan explicó que la expulsión está aparentemente vinculada a la emisión de un documental sobre las "cárceles negras" ' en China, centros de confinamiento extrajudiciales que las autoridades utilizan para arrestar a peticionarios.

El Club de Corresponsales de China, que agrupa a más de 500 profesionales extranjeros que ejercen en el país asiático, emitió un comunicado en el que se dice "consternado" por la situación y recuerda que Pekín sigue amenazando a los informadores con la expulsión si cubren asuntos relacionados con los derechos humanos.

Por lo menos 12 periodistas extranjeros fueron interrogados la semana pasada por la Oficina de Seguridad Pública (PSB) , después de que cubrieran noticias relacionadas con el caso del activista y abogado ciego Chen Guangcheng.

El Comité para la Protección de los Periodistas, con sede en Nueva York, indicó que el caso de Chan "marca un deterioro real en el entorno de medios de China y envía un mensaje de que la cobertura internacional no es deseada" .

La expulsión de Chan se produce en un marco de endurecimiento de las condiciones de trabajo para los periodistas en China, donde la ley, sin embargo, les concede libertad de movimientos por todo el territorio excepto el Tíbet desde los Juegos Olímpicos de Pekín 2008.

La irrupción de las revoluciones árabes, así como el aumento del poder de China en la escena internacional tras la crisis financiera, han provocado según los observadores independientes que Pekín se muestre más firme y crítico respecto a la cobertura de asuntos relacionados con los derechos humanos o la hegemonía del poder por parte del Partido Comunista.