Bogotá.- El negociador del gobierno colombiano en los diálogos de paz con la guerrilla de las FARC, Humberto de la Calle, pidió evitar el exagerado optimismo, ante los desafíos y riesgos que implica el proceso.

En entrevista que publicó este domingo el diario local El Tiempo, el exvicepresidente colombiano consideró que aunque "hay condiciones nuevas (para dialogar con la insurgencia), el proceso es nuevo, es diferente de los anteriores".

Por eso, "puede uno alentar alguna esperanza de que esta negociación funcione, pero me parece que no hay que hacer promesas exageradas; haremos el mejor esfuerzo, pero en este momento el resultado es aún impredecible", dijo.

Aunque consideró que "hay elementos que inducen al optimismo moderado", frente a las conversaciones que iniciarán en octubre, es bueno que "no se exagere el optimismo. Sabemos de la dificultad de negociaciones de esta naturaleza".

El gobierno del presidente Juan Manuel Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) comenzarán diálogos de paz el 8 de octubre próximo en Oslo, Noruega, para buscar poner fin a medio siglo de conflicto armado interno.

Las negociaciones, que luego seguirán en Cuba con el acompañamiento de Venezuela y Chile, girarán en torno a una agenda que incluye el desarrollo urbano, la salida al narcotráfico, el abandono de las armas y reparación de víctimas.

De la Calle explicó que ahora las circunstancias son diferentes, porque "hay una negociación fuera del país; no hay desmilitarización de ningún lugar del territorio y no hay cese de operaciones", como en el pasado.

"Hay personas que quieren muy rápidamente un cese del fuego, pero las condiciones para discutirlo son bastante complejas. El hecho es que no hay concesiones militares y esa es también una diferencia importante", dijo.

A esa situación se suma, según el negociador, el entorno internacional, donde existe "un deseo en toda Latinoamérica de lograr una paz en Colombia" y la correlación militar, gracias a los éxitos en el combate a la guerrilla.