Nicaragua.- Roberto Samcam, mayor en retiro del Ejercito de Nicaragua, denunció el uso de lanzacohetes rusos en contra de la población civil que se manifestaba este domingo en contra del gobierno de Daniel Ortega.

De acuerdo con el Centro Nicaraguense de Derechos Humanos (Cenidh) al menos tres personas resultaron heridas durante el enfrentamiento con las armas militares, cifra que se suma a los más de 180 fallecidos y 1500 heridos reportados por el instituto en su informe fechado a dos meses de haberse iniciado el combate.

El ex sandinista reportó el uso del RPG7, un lanzacohetes portátil fácil de manipular, en contra de la población de Jinotepec y Diriamba, poblaciones cercanas a la costa del Oceano Pacifico.

Sacam, quién se ha convertido en uno de los principales acusadores de los ocurrido, ha denunciado el uso de “fuerzas paramilitares” que han asesinado a cientos de jóvenes con armas de clase militar, además de la no intervención de las fuerzas armadas para cesar el conflicto a pesar del llamado que han realizado diferentes expertos para desarmarlos.

El choque entre gobierno y los ciudadanos, que inició el pasado 18 de abril, tiene sumergida a la población en la mayor crisis humanitaria que se ha vivido en el país centroamericano, ya que se reprime de manera generalizada a estudiantes, defensores de derechos humanos, empresarios y población en general.

La violencia comenzó tras las protestas de grupos estudiantiles y jubilados que se oponían a las reformas del Instituto Nacional Nicaragüense de Seguridad Social (INSS), que elevaba las contribuciones de empleados y empresarios e imponía una retención de 5 por ciento a los jubilados. A pesar de que la reforma no logró establecerse en la ley, el descontento social provocó que las personas decidieran continuar en las calles, lo que devino en actos de violencia por parte del Estado.

A pesar de las recomendaciones realizadas por organismos nacionales como el Cenidih, Amnistía Internacional y la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sobre el cese de la violencia, no ha existido voluntad política para atender las diferentes denuncias. Cabe destacar que el suceso resulta similar al conflicto que tuvo lugar en Nicaragua en la década de 1980, periodo en el que Daniel Ortega también era presidente.

Con información de El universal (Venezuela), El espectador (Colombia) y el Cenidih.