Un grupo ilegal de cazadores de animales silvestres fue capturado en la zona amazónica del norte de Brasil, bajo acusación de haber privado de la vida a miles de animales, entre ellos jaguares, carpinchos, pecaríes y venados. 

Al menos siete hombres formaban parte de esta organización que promovía la matanza de especies que habitan en la región. De acuerdo con información difundida por las autoridades locales, se calcula que el más antiguo de estos cazadores delinque desde 1997 y habría matado a mil jaguares, especie que se considera casi amenazada en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza. 

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Durante al menos tres meses, diversas instituciones judiciales vigilaron e interceptaron las conversaciones de los integrantes del grupo, hasta que lograron su detención; así se dieron cuenta que la organización delictiva utilizaba perros como carnada para llamar la atención de otros animales. 

Como parte de los resultados de los meses de investigación se informó que tan sólo en este corto lapso organizaron 11 salidas para cazar y que en ellas mataron a “ocho jaguares, 13 carpinchos, 10 pecaríes de collar y dos ciervos”. 

Por su parte, el medio local MPF no Acre aseguró que entre los detenidos hay un médico, un dentista, servidores públicos y otras personas que no dependen de la caza para subsistir. 

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Otros delitos aunados a la caza

Además de ser acusados por caza ilegal, la fiscalía investiga a los detenidos por guardar las pieles y la carne de los animales a los que mataban y por integrar una “asociación criminal armada”. 

Por los distintos delitos cometidos, cada uno de los involucrados podría hacerse acreedor a diversas multas e incluso a la prisión. Eso lo determinará la justicia local de acuerdo al nivel de implicación que los sujetos tengan en el caso. 

Con información de AFP.