El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, podría ser dado de alta del hospital Centro Médico Militar Nacional Walter Reed, el próximo lunes 5 de octubre, si continúa recuperándose de coronavirus Covid-19, según dijo uno de los médicos de Casa Blanca.

De acuerdo con agencias internacionales, el médico de la Casa Blanca, Sean Conley, informó este domingo, que al mandatario Donald Trump se le ha administrado un medicamento para controlar la inflamación con lo que “el presidente ha seguido mejorando. Como con cualquier enfermedad, hay frecuentes altibajos a lo largo del curso".

Por su parte, el doctor Brian Garibaldi, que forma parte del equipo médico del presidente, dijo que "nuestra esperanza es que podamos planificar un alta tan pronto como mañana en la Casa Blanca".

Sobre las condiciones de Trump, Conley detalló que el nivel de saturación de oxígeno en su sangre se redujo dos veces desde su diagnóstico, pero nunca por debajo del 90%; y que el equipo médico decidió después de algunas discusiones, administrar dexametasona, un esteroide que se usa para tratar la inflamación en pacientes con coronavirus.

Con lo anterior, se sabe que hasta ahora, a Donald Trump se le ha administrado un "cóctel de anticuerpos" experimental, así como Remdesivir, un fármaco antiviral.

Aseguran que Trump pronto regresará a campaña electoral

Por su parte, Jason Miller, asistente de campaña de Donald Trump, dijo que el presidente pronto estará "listo para volver a la campaña electoral" y mencionó que el mandatario recomendó a la población, lavarse las manos, usar desinfectante, distancia social y utilizar cubrebocas.

Este fin de semana, debido a la hospitalización de Trump en Walter Reed, sus asistentes acudieron a los programas de noticias para resolver las dudas sobre su campaña de reelección. Miller dijo que Trump "va a derrotar" al virus.

Hasta el momento, al menos 15 personas han resultado positivas a Covid-19 que están relacionadas con eventos en la Casa Blanca, incluido Hope Hicks, el director de campaña Bill Stepien y simpatizantes, el exgobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, y los senadores republicanos Thom Tillis, Mike Lee y Ron Johnson.