Más de 150 personas murieron este jueves 2 de julio en un accidente originado en la mina de jade más grande del mundo, ubicada al norte de Birmania y cerca de la frontera con China. Las autoridades locales señalan que se trata de una de las peores catástrofes de los últimos tiempos.

Los hechos ocurrieron alrededor de las 08:00 de la hora local, cuando las fuertes lluvias que azotan el norte de Birmania provocaron un derrumbe. La avalancha sepultó a un grupo de mineros que trabajaban en las excavaciones, y en los últimos reportes la cifra aumentó a más de 150 fallecidos.

En redes sociales circulan imágenes y videos grabados por testigos, donde se muestra el derrumbe y los intentos de las personas por alejarse del lugar. El Departamento de Bomberos señaló que solo han podido recuperar alrededor de 30 cadáveres.

Las autoridades aseguran que este tipo de sucesos son frecuentes en el municipio de Hapakan, donde los mineros son obligados a trabajar en condiciones precarias. En el mes de abril, más de 50 personas murieron a causa de otro derrumbe a 800 kilómetros de la capital de Birmania.

El país asiático es uno de los mayores productores de jade en el mundo, por la gran variedad que puede extraerse en sus montañas. Miles de migrantes y residentes de otras zonas del país son contratados por empresas multinacionales de manera informal y sin ofrecer condiciones de seguridad.