Montevideo, 27 may (EFE).- La coalición de izquierda Frente Amplio (FA), que desde hace siete años gobierna en Uruguay, eligió hoy a sus autoridades en una votación en la que los cuatro candidatos a la presidencia destacaron la necesidad de unidad y de "cambiar" cosas en la interna "que no se han hecho bien".

 

"Es cierto" que en el tiempo que "llevamos de Gobierno no logramos transformar algunas cosas" que la gente reclama y por ello "hay cierto enojo en los frenteamplistas", dijo la senadora Mónica Xavier, favorita según las encuestas para ser la próxima presidenta del FA.

 

Tras destacar que la coalición de izquierda tiene 41 años de historia, señaló que las discrepancias "que por suerte las hay" no "nos llevarán a acuchillarnos" sino a "buscar mayor unidad en la pluralidad", agregó la legisladora, médica de profesión.

 

Xavier pertenece al Partido Socialista, el mismo de Tabaré Vázquez, primer presidente de izquierda en la historia de Uruguay (2005-2010) y que se perfila para volver a ser candidato en los comicios de 2014.

 

Vázquez dejó la presidencia con un alto porcentaje de aceptación y decidió alejarse de la política para dedicarse a su profesión, la medicina oncológica, aunque la pasada semana le hizo "un guiño" a la interna del FA recibiendo en su casa a los cuatro candidatos a la presidencia y fotografiándose con ellos, casi en un acto de campaña.

 

Además hizo un llamado a "todos los frenteamplistas" para que concurrieran a las urnas.

 

El también senador Enrique Rubio, segundo favorito, calificó la elección como "un gran acto democrático y muy lindo".

 

Esta es la primera vez que el Frente Amplio, que agrupa a socialistas, comunistas, marxistas, demócrata cristianos, los exguerrilleros tupamaros, independientes y otros partidos y grupos hasta totalizar 29, elige de manera directa a su futuro presidente.

 

Esta elección "no tiene antecedentes en el país", agregó Rubio, en referencia a que permitió mezclar hojas de diferentes partidos y grupos en el sobre de votación.

 

Además de presidente, en las elecciones se definen todas las autoridades de la coalición de izquierda, presidentes de las diecinueve departamentales, los miembros de los plenarios nacional y departamental y la representación de los diferentes sectores y las bases.

 

Debido a la "complejidad del escrutinio" los resultados estarán "dentro de diez días aproximadamente", dijo a Efe el responsable de Comunicación del FA, Jorge Galcerano.

 

Destacó que los frenteamplistas radicados en el exterior también votaron en mesas instaladas en Argentina, Australia, Estados Unidos, Canadá, España, Francia, México y Suecia.

 

Tres delegados del exterior, uno por los países del Mercosur, otro por el resto de América y uno más por el resto del mundo serán elegidos para integrar el Plenario Nacional del FA que tiene 144 miembros.

 

Al promediar la jornada electoral fuentes del FA estimaron que 120.000 personas habían pasado por las urnas y el objetivo de la coalición era superar los 220.000 sufragios de las anteriores elecciones celebradas en 2006.

 

El también senador Ernesto Agazzi, que pertenece al Movimiento de Participación Popular (MPP) del presidente José Mujica, y tercero en la carrera a la presidencia según una encuesta de la empresa Interconsult difundida el viernes, admitió que la elección estuvo "un poco fría", en referencia a la participación popular.

 

"Empezamos a entusiasmar a la gente" con vistas a las elecciones nacionales de noviembre de 2014, señaló Agazzi en declaraciones a medios locales.

 

Según una encuesta difundida a finales del pasado mes, si las elecciones presidenciales se hubieran celebrado el 29 de abril, el Frente Amplio tenía una intención de voto del 40 por ciento, casi un 11 por ciento menos que cuando el presidente José Mujica ganó en la segunda vuelta electoral en noviembre de 2009.

 

El Partido Nacional recibe el 22 por ciento del apoyo y el Partido Colorado el 16 por ciento con lo que juntos casi alcanzan a la izquierda en la preferencia de los votantes.

 

El líder sindical y dirigente comunista Juan Castillo, cuarto aspirante a la presidencia del FA pero con pocas posibilidades, dijo que la coalición "tiene problemas" entre otras cosas porque "muchos de sus votantes están un poco desilusionados".

 

"Debemos sacudir la modorra interna y es necesario remover las estructuras del Frente Amplio", afirmó.Jorge Figueroa