La supernova 1987a ha sido uno de los fenómenos astronómicos más estudiados desde su descubrimiento a finales del Siglo XX; los astrónomos trataron por 34 años de encontrar la estrella de neutrones que la originó sin éxito, sin embargo, un grupo de la NASA podría haber resuelto el misterio.

La estrella de la supernova 1987a sería actualmente un púlsar, el cual se localizaría dentro de la zona de explosión, para ser más exactos, en el centro de la misma; esto de acuerdo con el comunicado lanzado por la NASA.

Hay que señalar que además de dar con el origen del fenómeno, este pulsar sería el más joven jamás encontrado, lo que ayudaría a los investigadores a dilucidar algunas preguntas alrededor de las estrellas de neutrones y supernovas.

Supernova 1987a

¿Cómo encontró la NASA la estrella de la supernova 1987a?

Aunque la NASA necesitó más de 3 décadas de análisis para dar con la estrellas de neutrones de la supernova 1987a, el método que usaron para localizarla fue relativamente sencillo, pues se enfocaron en detectar la radiación derivada del púlsar que dejó la luminaria tras su muerte.

Los púlsares emiten una gran cantidad de Rayos X , dicha estela se puede localizar desde la Tierra gracias a los radiotelescopios, lo que hicieron investigadores de la NASA fue calibrar los instrumentos para que dieran con ese rastro de radiactividad.

Supernova 1987a

Una vez hecho esto, se encontró una cantidad inmensa de Rayos X procedentes del centro de la supernova 1987a; de ahí que se asumiera que estos procedían del púlsar dejado por la estrella muerta.

Algo ha señalar es que, aunque se tiene confianza de que por fin se encontró la luminaria, la prueba irrefutable se dará con el paso del tiempo; si los Rayos X desaparecen, entonces ahí tenemos los restos de una estrella, si por el contrario permanecen o aumenta, sería otra cosa la que los está emitiendo.

Con información de NASA.