Aunque parezca algo que nunca llegará, el sol que vemos todas las mañanas aparecer en el cielo, eventualmente va a morir igual; su energía nuclear terminará e igual que sucede con otras estrellas, se apagará. 

Lo que es un hecho es que faltan miles de millones de años para que suceda y muy probablemente para entonces ya nada sea como lo conocemos, para empezar porque la vida en nuestro planeta depende en gran medida del gran astro y conformé el vaya cambiando, cambiará todo en el sistema solar. 

Se sabe que cuando el sol muera, se convertirá en una estrella enana y ahora, gracias a un nuevo estudio de científicos de la Universidad de Warwick, podemos darnos una idea de cómo sería su cadáver. 

Luego de analizar más de 150 mil estrellas enanas blancas con la ayuda del satélite Gaia de la Agencia Espacial Europea, los astrónomos llegaron a la conclusión de que las estrellas, además de encogerse y enfriarse, cambian su estructura y se cristalizan. Por lo tanto, nuestro ardiente sol un día será una fría esfera de cristal. 

University of Warwick / Mark Garlick

"Todas las enanas blancas cristalizarán en algún momento de su evolución", afirma el astrofísico de la Universidad de Warwick Pier-Emmanuel Tremblay, autor principal de la investigación. 

Con información de Nature y RT.