Alrededor del mundo, poco a poco, algunos museos y otro tipo de recintos dedicados al artes, han comenzado a rendirse ante los encantos y la inminente popularidad del enigmático Banksy y han agregado obras del autor a sus colecciones. Recientemente lo hizo el prestigioso Museo Británico. 

La institución adquirió un billete falso creado y producido por el propio Banksy en 2004, año en que los arrojó a la multitud reunida en el carnaval de Notthing Hill en Londres. 

La obra que fue autentificada por Pest Control (la empresa de certificación del artista), representa un billete de 10 libras que en lugar de tener como protagonista a la Reina Isabel de Inglaterra, tiene a Lady Di mirando hacia arriba y con media sonrisa dibujada en un gesto hasta cierto punto gracioso. 

Di-Faced Tenner, es el nombre con el que fue identificada la serie de billetes falsos y hace alusión al nombre de la princesa fallecida en 1997. 

Banksymus Maximus

Por e momento, el Museo Británico no ha confirmado que esté en sus planes exhibir el billete, pero la sola compra marca un acontecimiento pues representa de alguna forma que la institución valora y reconoce el trabajo del artista de quien se desconoce aún su identidad. 

Todo esto a pesar de que en 2005, Banksy le jugó una pesada broma al museo al colocar una piedra en la que se veía un dibujo de un humanoide con crestas en la espalda que empujaba un carrito de supermercado mientras cazaba a un animal gigante. 

La pieza (que ahora también es considerada arte) estuvo en el lugar tres días sin que nadie notara su presencia, hasta que el bromista artista reveló el secreto. 

Este es el texto de la ficha que acompañó a la piedra:

Con información de El País.