Un incendio forestal que estuvo activo por más de 30 días en la zona arqueológica de Ichkabal, en Quintana Roo, destruyó la decoración hecha en estuco que data de más de 2 mil 400 años de antigüedad.

El fuego dio inicio desde el pasado abril y aunque la lluvia del 9 de mayo lo mitigó, las llamas habían llegado hasta el estuco, terminando completamente con este, según confirmó la arqueóloga Sandra Balanzario en entrevista con La Jornada

Incendio destruye estuco de zona arqueológica de Ichkabal

Asimismo, se estima que la afectación al patrimonio natura del sitio prehispánico ubicado a unos 40 kilómetros de Bacalar, es de entre 30 y 35 por ciento, aunque el más dañado fue el edificio principal, conocido como E4.

"El tema de los incendios no es nuevo. Suceden desde la época prehispánica, pero el problema se ha incrementado los recientes años debido al cambio climático, algo preocupante para la protección del patrimonio cultural"

Margarito Molina, arqueólogo delegado del INAH.

Considerando que el área está compuesta por seis edificios distribuidos alrededor de una plaza de siete hectáreas, al E4, de 46 metros de altura, el incendio lo sorprendió del lado oriente y afectó su basamento y fachada oriente, se extendió a la fachada norte y continuó hacia parte de su fachada poniente.

Pero también resultaron afectado el entorno natural como la aguada de los cocodrilos, un reservorio de agua asociado al área monumental, con una extensión de una hectárea. En consecuencia, fueron 4 mil 200 hectáreas afectadas, además de que los estucos y la policromía en rojo fueron destrozados.

Como explica la especialista, Ichkabal podría equipararse a Chichén Itzá debido a su monumentalidad que ofrece vestigios de asentamiento del periodo preclásico, mismos que brindan las condiciones propicias para el estudio de la organización política, económica y social que tuvieron los mayas en esa región.