Un par de misteriosas esculturas de la figura de un papa o arzobispo aparecieron sin previo aviso en la puerta de San Cristóbal de la Catedral de Puebla. Aunque aún nadie sabe quién las puso y por qué, en redes la gente ha señalado al artista anónimo Banksy como posible autor. 

Pese a que hay algunas coincidencias con la forma de actuar de Banksy, el estilo de la obra no coincide con lo que hasta ahora se conoce de él, y en todo caso, tampoco se la ha adjudicado, como suele hacer cuando se descubre una de sus nuevas creaciones. 

De cada lado de la puerta del importante recinto, fue colocada un escultura que representa a un líder de la religión católica sosteniendo un saco con el signo de libras en una mano y haciendo una seña con la otra. 

La figuras están hechas de yeso y sólo fueron sobrepuestas en un hueco propio de la arquitectura del lugar, por lo tanto, la intervención artística temporal no dañó ni modificó la catedral.  

"Me gusta el dinero"

Debajo de cada escultura, el artista escribió un texto en el que se lee la frase en latín "Ego quasi pecuniam", lo que algunas personas en Twitter han interpretado como "Me gusta el dinero", y otras como “Yo pregunto y cobro”; sea cual sea el significado real, queda claro que la intención del artista era imprimir en su obra un mensaje sobre la forma en que el dinero se mueve entre la clase poderosa de las religiones. 

Según puede verse en una foto publicada en la misma red social, una de las piezas fue derribada y se rompió con el golpe, pero no se sabe a ciencia cierta cuál fue el destino final de ambas.