El impactante hallazgo de los cadáveres se hizo durante la construcción de una carretera en Polonia; expertos indican que se trata de una fosa común de los siglos XVI y XVII.

Un grupo de arqueólogos descubrieron una fosa común con al menos 115 cadáveres con monedas en la boca en la ciudad de Nisko, Polonia. Según las estimaciones entre el 70% y 80% pertenecen a menores de edad.

Especialistas de la Dirección General de Carreteras y Autopistas detalló ante The First News que la mayoría de estos cuerpos que datan de entre 1587 y 1632 poseían monedas en sus bocas, un claro signo de su religión y creencias.

Muchas de las monedas encontradas son de época de Segismundo III Vasa, un rey católico de Polonia que mandó desde 1587 a 1632; también gobernó Suecia, su país natal. También se encontraron algunas del reinado de Juan II Casimiro, hijo de Segismundo que gobernó de 1648 a 1668.

Los expertos indican que estos entierros se practicaban en mayor medida en la antigua Grecia y Roma. Las monedas son ‘óbolos de los muertos’ u ‘óbolos de Caronte’ que, aunque es una costumbre precristiana fue incluso practicada por el papa Pío IX cuando falleció en 1878.

Caronte, en la mitología Griega era el barquero encargado de transportar las almas por el río que dividía a los vivos y muertos hasta el Inframundo. Para ello exigía un pago por lo que era costumbre acompañar a sus muertos con monedas encima, ya fueran en los ojos o en la boca.

La conservación de los cadáveres permitieron a los arqueólogos investigar más allá y comprobar que se trataba de una fosa común que perteneció a una iglesia católica pero de una región pobre ya que no había ningún otro objeto en las tumbas:

“Según las fuentes, durante una visita de los obispos de Cracovia a Jezowe en 1604 ya había una gran iglesia parroquial. Probablemente ya existía desde 1590”

Katarzyna Oleszek

Algunos de los pobladores de Jezowe aseguraban que en la antigüedad existió un cementerio infantil por lo que se había batallado durante años para cambiar el trayecto de la carretera como parte de un proyecto que pretende unir los estados bálticos con el sudeste de Europa.

Los cuerpos de los niños se encontraron en una posición de este con las cabezas hacia el oeste y, en una tumba había al menos cuatro cuerpos, también con monedas en la boca. Además, los excavadores polacos también hallaron dos entierros de perros.