Ayer, un estudio publicado por la revista Nature advertía sobre la relación entre el consumo elevado de sal y el desarrollo de demencia. Ahora, una investigación realizada por científicos británicos ha descubierto un vínculo entre la ingesta excesiva de azúcar y la aparición de Alzheimer.

La investigación, realizada por científicos de la Universidad de Bath y el King’s College de Londres, analizó muestras cerebrales de 30 personas con y sin Alzheimer, a fin de identificar las moléculas de azúcar en el sistema. 

El azúcar no sólo produce obesidad.

El estudio encontró que la glucosa (una forma de azúcar que se encuentra en las frutas y la miel) y los metabolitos (molécula producida durante el metabolismo) pueden modificar negativamente las proteínas, haciendo que se deshidraten y degeneren a través de un proceso denominado glicación.

Los especialistas precisaron que las primeras etapas del citado proceso dañan a la enzima MIF (Factor Inhibidor de Migración), que además de tener un papel fundamental en la regulación de la insulina, otorga una enorme protección contra el Alzheimer

Así, entre más azúcar se consuma más daños se generan en la barrera de protección, subrayaron los investigadores.

Hallan vínculo entre alto consumo de azúcar y desarrollo de Alzheimer.

El Alzheimer es una enfermedad neurodegenerativa, que de forma paulatina, hace que las células del cerebro se consuman y mueran. Esto produce daños en la memoria, el pensamiento y el lenguaje, evitando que las personas puedan cubrir sus necesidades básicas. 

La enfermedad, para la que no existe cura hasta el momento, comienza a manifestarse después de los 60 años y suele atacar con más frecuencia a las personas que tienen antecedentes familiares. 

De acuerdo con la Asociación de Alzheimer, tan sólo en Estados Unidos, cinco millones de personas padecen esa enfermedad y se prevé que la cifra aumente a 14 millones de pacientes para el año 2050.