México.- Pobladores del municipio de Nahuatzen, Michoacán, mantienen retenidos desde el domingo a dos funcionarios y un empresario debido al conflicto derivado de la lucha por el control de la Alcaldía, señalan autoridades estatales.

Los retenidos son el síndico Abraham Serna y la regidora Leonarda García, así como un empresario local que no ha sido identificado.

De acuerdo con el Secretario General del Gobierno estatal, Adrián López Solís, se privilegía el diálogo con el grupo de inconformes, sin embargo, no descarta el uso de la fuerza pública para liberar a los retenidos, "nosotros quisiéramos no llegar a esos extremos", señaló.

El conflicto en Nahuatzen comenzó cuando habitantes de la cabecera municipal, quienes históricamente habían tenido el control del Ayuntamiento, se inconformaron con los resultados del proceso electoral del pasado 7 de junio donde resultó ganador el perredista Miguel Prado Morales, quien es originario de la comunidad de Arantepacua.

Cuando asumió el poder el 1 de septiembre, Prado Morlaes fue recibido con manifestaciones lideradas por comuneros, que integraron un Consejo Ciudadano Municipal para vigilar las acciones del gobierno local y exigieron que el presupuesto de la Alcaldía sea distribuido entre las diferentes comunidades que integran el municipio, reporta Reforma.

Las diferencias entre las autoridades y los pobladores inconformes ocasionó que los últimos, se hicieran del control del Ayuntamiento e impidieran al edil desapachar desde sus oficinas, pero la violencia estalló el domingo en la madrugada cuando un grupo de encapuchados arribó a la cabecera municipal y presuntamente agredió a los manifestantes, dejando tras de si a 2 lesiones y 3 motocicletas dañadas.

Los pobladores, entonces, tomaron la decisión de buscar a las autoridades locales en sus domicilios, pero únicamente encontraron al síndico y la regidora, además cavaron una zanja en los límites del pueblo mediante una retroexcavadora y reforzaron la vigilancia en los accesos.

De acuerdo con La Jornada, la queja de los pobladores deriva de que presuntamente, el edil estaría empleando personas vinculadas al crimen organizado y solicitar la intervención la ayuda de la Policía Indígena de Paracho para calmar la tensión entre los inconformes.

Además de que los encapuchados habrían sido personas enviadas por Prado Morales para desalojar a los manifestantes que estaban aposentados en el Ayuntamiento, 'levantando' a cuatro personas que aparecieron poco después, golpeadas.