El gobierno de Guadalajara fortalecerá su estrategia para convertir a la ciudad en la más limpia de México. Mario Silva, Jefe de la Oficina Ejecutiva de Presidencia, señaló que el mayor reto es la indiferencia de algunos ciudadanos que tiran basura en calles, baldíos y canales.

De las más de 526 mil toneladas recolectadas durante esta administración, casi la mitad proviene de espacios públicos.

Sanciones y cultura de corresponsabilidad

Silva aclaró que no se busca multar por recaudar, sino cambiar hábitos ciudadanos. Las sanciones económicas —que van de 2,262 a 226 mil pesos— solo aplican a quienes reinciden o son sorprendidos en flagrancia.

Como alternativa, los infractores de Guadalajara pueden optar por trabajo comunitario; hasta ahora, 599 de 725 sancionados han elegido esta vía.

Operativos en puntos críticos

Las acciones se intensificarán en corredores comerciales y colonias con reincidencia, como Ferrocarril o el Canal Luis Covarrubias, donde se han retirado cientos de toneladas de residuos en repetidas ocasiones.

Las brigadas de limpieza operarán junto a personal de Justicia Cívica y Cuidamos Guadalajara, reforzando también la socialización en eventos comunitarios.

Denuncia ciudadana como clave

El éxito de esta campaña no se mide en multas, sino en la reducción de reportes por basura de Guadalajara.

Las denuncias pueden realizarse de forma anónima al 070, al GuaZap 333-610-1010, o a Justicia Cívica al 331-201-6000, extensiones 6259 y 6237.

El llamado del gobierno es claro: transformar Guadalajara en una ciudad limpia requiere la corresponsabilidad de todos.