México.- Para barrer, lavar trastes, cuidar a sus nietos y hasta para hacer tamales, era usada la trabajadora de base del Congreso del Estado de Tabasco, Ángela Castillo Frías, por la diputada de Morena, Candelaria Pérez Jiménez.
Castillo Frías denunció que fue empleada como secretaria de oficina de gestoría para apoyar en tareas legislativas, sin embargo, como nunca le pedían nada, la legisladora le comenzó a poner labores domésticas en su casa.
Como ambas viven en el municipio de Jalpa, “al menos por mi beneficio de no viajar hasta acá (al Congreso), pues acepte una que otra cosa, pero cada día fueron creciendo más las actividades”, prosiguió.
Según Ángela Castillo, después le encargó cuidar a sus nietos y hasta cocinar tamales cuando se celebraba alguna fiesta.
La empleada comentó que no se había atrevido a denunciar por temor a represalias; ahora lo hizo porque la diputada la está calumniando supuestamente por la deuda de un mes de trabajo.
La diputada morenista, quien concluye funciones este 4 de septiembre, rechazó las acusaciones.
No es la primera vez que la legisladora se ve envuelta en una controversia, pues durante su gestión fue evidenciada con videos durmiendo durante sesiones del Congreso y al decir que “le gustaría que los gays no existieran”.
El diputado local del PRD y presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), José Antonio de la Vega, dijo que el Congreso tenía 150 trabajadores sindicalizados sin función alguna, pero no podían ser despedidos porque se podrían pagar laudos millonarios.
Con información de Proceso, Excélsior y El Sol de Tabasco