La noche de ayer se llevó a cabo la gran final de la segunda temporada de MasterChef Junior en la que Diego Fernández resultó ganador.

El originario de Querétaro logró controlar los nervios en la cocina frente a sus contrincantes: Rebekah y Emiliano

Al chico de 12 años le ayudó que a Emiliano no se le cociera la carne y que su compañera Rebekah estuviera nerviosa y llore y llore todo el tiempo, sin olvidar que la monja ayudó a la niña después de que ésta se quemara con el aceite. *¿No que era trampa?

Bien merecidos, Diego se llevó a casa un millón de pesos.