Una noche lluviosa aparecen en la entrada de su casa dos hermosas mujeres, Evan -como buen samaritano- decide ayudarlas en su pequeño problema sin imaginar que esto desencadenará una corrida de lujuria e infidelidad. Eli Roth nos presenta este último esfuerzo como director.
El realizador entró por la puerta con sus primeras cintas ?Cabin fever? y el éxito extraño de ?Hostel?, ya ha madurado y explora el terror de diferentes formas, en este proyecto busca causar el desconcierto con la incomodidad del personaje principal agregando la sensacion de vértigo de perder todo: su esposa, sus hijos, su vida cotidiana. Un tema impresionante y que grandes directores han explorado, desde Kubrick con ?Ojos bien cerrados? hasta Michael Haneke con ?Funny games?.
Roth, sin embargo, se pone un límite a la hora de explorar su historia, cada secuencia, cada diálogo, nos conduce a lo evidente pero todo cambia cuando este realizador da un giro inesperado que termina dejándote con una sensacion de frustración.
Si pudiéramos calificar de alguna forma el desenlace y situaciones que se presentan, posicionaríamos este filme dentro del género de la comedia, una comedia oscura más que una película de terror psicológico donde las situaciones que viven los personajes son impresionantemente similares a un capitulo de ?Tom y Jerry?.
Lado Oscuro del Deseo es protagonizada por Keanu Reeves en el papel de padre de familia que es seducido por un par de sexys mujeres interpretadas por Ana de Armas y Lorenza Izzo, ambas hacen una excelente actuación y mantienen la cinta a flote; no obstante, Keanu -en ocasiones- se convierte en un recurso narrativo más que un elemento clave.
Roth junto a Nicolás López y Guillermo Amoedo escriben este guión de una forma desenfada cayendo en clichés imperdonables en una cinta de terror de este calibre, además de presentar diálogos que parecieran salidos de una telenovela colombiana, acartonados y en mas de una ocasión absurdos.
Conclusión: es perfecta para aquellos gustosos de los filmes de suspenso con comedia oscura con un toque de terror. Sí, todo eso.