México.- Corría la temporada 1986-87 en la Serie A. La gran figura del Napoli, equipo que salió campeón, era Diego Maradona. Desde la banca, su gran amigo Pietro Puzone apoyaba y disfrutaba con la magia del crack.

El futbol y la vida son auténticas ruedas de la fortuna; unas veces se toca el cielo con las manos, y al otro momento todo es sombrío. Así justo pasó con Pietro Puzone, quien fue encontrado viviendo en situación de calle y padeciendo adicciones.

De acuerdo con La Gazzetta dello Sport, el otrora jugador del Napoli habita actualmente las calles de Acerra, pueblo que lo vio crecer y que está a unos cuantos Kilómetros del Estadio San Paolo, donde vivió incontables alegrías al lado del “Pelusa”.

Asimismo, el referido medio detalló que la trágica situación que enfrenta Puzone se dio a conocer en un grupo de WhatsApp que integran varios exfutbolistas que jugaron a su lado en aquella época y en el cual se difundieron imágenes de su estado actual.

Pietro Puzone y el histórico partido altruista de Maradona

Segun dijo el alcalde de Acerra, Raffaele Lettieri, en mayo pasado Pietro Puzone estuvo unos días bajo vigilancia en medio de los días más álgidos de la pandemia de coronavirus. Sin embargo, no aceptó quedar bajo resguardo de la institución local que trata las adicciones.

“Nos ocupamos de él en mayo, en la emergencia de Covid-19 y las conversaciones previas que mantuvo con el servicio para la drogadicción no resultaron. Si sus antiguos compañeros lo hicieran sentir importante, podría ser un buen estímulo”.

Raffaele Lettier, alcalde de Acerra

Puzone fue muy conocido en Nápoles debido a un impresionante y noble gesto, pues en 1984 organizó un partido a beneficio de un niño enfermo. Aunque la FIFA no autorizó dicho encuentro, Maradona tomó la batuta y desafío al máximo organismo en aras de llevar a cabo el duelo en una cancha de barrio.

Tal hecho refleja lo escrito hace tiempo en el diario Il Mattino acerca de su estrecha relación con Diego Maradona, misma que se hacía más fuerte en las “noches marcadas por la transgresión”.

Con más pena que gloria, el otrora delantero le dijo al futbol profesional tras la campaña 1996-97, en la que defendió la playera del US Boys Calvanese.