Londres.- El clavadista mexicano Yahel Castillo dijo que se siente tranquilo, pero no satisfecho por el séptimo sitio conseguido este miércoles en la final de trampolín de tres metros sincronizados de los Juegos Olímpicos de Londres 2012.

Castillo, quien, junto a Julián Sánchez, terminó como la pareja de bronce de Shanghai 2011, comentó que desafortunadamente las cosas no salieron como se esperaba, a pesar de haber trabajado de manera ardua para buscar estar en el podio.

"La verdad íbamos bien, estamos bien preparados para esta competencia, a la cual gran parte de las moneditas las habíamos puesto en esta prueba", argumentó el clavadista mexicano.

Sostuvo que en una prueba de clavados como la que vivieron este miércoles en la fosa del Centro Acuático, siempre pueden pasar varias cosas, desde ir en primer lugar en el primer salto hasta quedar en último.

"Sabíamos que esto podía pasar, que están los mejores del mundo y por ende la competencia sería complicada. En esto, como podemos estar en primer sitio desde el inicio de la prueba, como llegar hasta ubicarnos en el último", señaló.

Castillo Huerta recordó que la falla estuvo en el salto con más grado de dificultad (3.8), pero también en el quinto, en el que las cosas no se dieron para poder remontar.

"Ahora no queda más que asimilarlo, tomar lo bueno del error y trabajar para la prueba individual. El cuarto clavado debía ser ejecutado bien, los debíamos tirar para 100", expuso.