México.- Queda claro que Lionel Messi es de otro planeta. Este sábado 22 de febrero y después de un largo rato sin meter gol, el genio rosarino volvió a dar una exhibición sensacional al clavar cuatro de los cinco pirulos con el Barcelona derrotó al Eibar.

El camino hacia el póker inició al minuto 14 con un brutal tanto, pues Messi tomó la pelota en los linderos del área y con caño incluido dejó sembrado a un rival para luego definir con sutileza ante los esfuerzos inútiles del arquero visitante.

Pero el encuentro de la Jornada 27 de La Liga todavía tendría reservada más magia del diez culé. Y es que al 36’ de acción protagonizó una internada por la parcela izquierda donde de nuevo quedó marcada su impronta, ya que cambió de ritmo y definió cruzado.

Casi de inmediato, la “Pulga” anotó el tercer tanto de la contienda al aparecer oportunamente luego de que Antoine Griezmann desaprovechara un pase que él mismo le dio.

Otra clase de regate completa el póker

A esas alturas el encuentro estaba más que finiquitado; sin embargo, los pupilos de Quique Setién lograron ampliar la ventaja, aunque eso sí, quedó la impresión de que el Eibar merecía mínimo un gol como premio del asedio que realizó en un lapso del complemento.

El cuarto tanto de Messi llegó hasta la recta final del compromiso, cuando la pelota le quedó en plena área chica y, con inquietante calma, se quitó primero a un defensa, luego a al arquero y finalmente envió la de gajos a besar la red.

El tanto que selló la manita del Barcelona fue obra de Arthur Melo un minuto antes de que se cumpliera el tiempo regular. De modo que los culés llegaron a 55 puntos, lo que les permite ser líderes provisionales del campeonato a una semana del Clásico Español contra Real Madrid.