Drama auténtico fue el que se vivió este sábado 23 de noviembre en el Estadio Monumental de la U, en Lima, donde Flamengo vino de atrás en los últimos minutos para remontar ante River Plate y consagrarse campeón de la Copa Libertadores de América por segunda vez en su historia. 

Y es que el equipo dirigido por Marcelo Gallardo tuvo todo para proclamarse como bicampeón del continente; sin embargo, el futbol volvió a demostrar que todo puede cambiar en cuestión de minutos. 

El 'Millonario' se adelantó en el marcador al minuto 14 con una buena definición de Rafael Santos Borré, gol que hacía soñar a la afición del equipo argentino. 

Flamengo, que no había generado una de peligro en el primer tiempo, fue mejor en el complemento, pero no lograba marcar el tanto del empate. Fue hasta el minuto 89 cuando, tras una buena jugada colectiva, apareció Gabriel Barbosa para empujar el balón al fondo de las redes. 

Pasarían tres minutos para que 'Gabigol' aprovechara el derrumbe de River y marcara el 2-1 final con un disparo que venció a Franco Armani para darle el campeonato al Flamengo, la segunda Libertadores en la historia del club (1981). 

'Gabigol' sorteó la maldición de la Copa

Una de las tantas reglas no escritas en el mundo del futbol, y de las más importantes, es que ningún jugador o miembro de un club toque el trofeo previo al encuentro decisivo; no obstante, esto no importó a Gabriel Barbosa, quien se animó a tocar la Copa Libertadores antes de comenzar el partido ante River Plate.

El exatacante de Benfica fue el último en saltar al terreno de juego por parte su equipo, pero el primero y único que tuvo la osadía de tocar el trofeo continental pese a la conocida maldición

Y es que parecía que la maldición de tocar la copa se haría presente en el Monumental de la U; no obstante, el propio Gabigol se encargó de marcar los goles con los que el Flamengo le dio la vuelta al marcador para llevarse la preciada copa.