La Selección Mexicana Sub-21 consumó uno de los fracasos más importantes en la historia del futbol nacional al quedar eliminada en la fase de grupos de los Juegos Centroamericanos y del Caribe en Barranquilla 2018 tras no pasar del empate ante el cuadro de Haití, rival que volvió a ser protagonista en un mal episodio del Tri. 

Y es que el equipo mexicano necesitaba tan solo derrotar al equipo caribeño para acceder a las semifinales; sin embargo, no lograron pasar del empate a un gol, con lo que no les alcanzó para pasar, quedando eliminados. 

Pero esta no es la primera vez que México consuma un fracaso con Haití como protagonista, pues los caribeños han estado en otros grandes fracasos como en eliminatorias mundialistas. 

La primera fue en el Premundial de Concacaf de 1973, cuando el equipo mexicano conformado por jugadores como Enrique Borja, Horacio López Salgado y Rafael Puente consumaron uno de los primeros grandes fracasos del Tri. 

El equipo empató sin gol ante Guatemala, goleó a las Antillas Holandesas, empató con Honduras y cayeron goleados ante Trinidad & Tobago. En su último partido derrotaron a Haití, aunque el resultado no fue suficiente para acceder al Mundial. 

La segunda ocasión fue en el Premundial para España 1982, cuando el equipo mexicano, con Hugo Sánchez como principal figura, no se calificó al Mundial luego de un par de empates ante Honduras y Haití y una derrota ante El Salvador. 

El más reciente fue en el Preolímpico de Beijing 2008, en lo que fue una historia muy similar a lo que ocurrió en Barranquilla 2018. 

Al igual que en territorio colombiano, en el preolímpico se presentó una selección juvenil, la cual fue dirigida por Hugo Sánchez. El equipo empató con Canadá y perdió ante Guatemala, dejando su suerte ante Haití, rival al que tenían que golear 5-0 para acceder a la siguiente ronda. 

Sin embargo, el equipo mexicano dio uno de los peros partidos en la historia, el cual será recordado por las remarcares fallas de jugadores como Santiago González, César Villaluz y Luis Ángel Landín.